Hace año y medio Bunbury estaba resignado a no volver a subirse a un escenario. Unas inexplicables (y muy dolorosas) molestias en la garganta cada vez que lo hacía le obligaron a tomar una drástica decisión: abandonar las giras par siempre. Meses después el artista aragonés recibió un diagnóstico que resolvía el enigma. Es intolerante a una sustancia llamada glicol presente en los efectos de humo que se utilizan en los conciertos. Saber lo que pasaba fue un alivio para el cantante, y también para sus fans. Ahora Bunbury retoma sus shows en vivo, primero con nueve fechas en América este 2023 y el próximo año con dos paradas en España, Madrid (29 de junio) y Zaragoza (6 de julio). Y ha contado en una multitudinaria rueda de prensa a través de Zoom cómo hará para evitar volver a dañar sus cuerdas vocales.
El ex Héroe del Silencio ha explicado que han encontrado una empresa que fabrica humo para los conciertos que no contiene el Propylene Glycol, el químico que le provocaba la tos en su garganta: "Usan una glicerina vegetal en vez de química". Pero que pueda volver a subir a un escenario sin problemas no significa que Bunbury tenga en mente volver a las grandes giras. "Seguiré haciendo conciertos selectos, una gira tan extensa como las de antes, de uno o incluso dos años, no entra en mis planes ahora mismo", admite el aragonés, sin descartar que en el futuro pueda cambiar de opinión.
De hecho, los dos conciertos en España previstos para 2024 serán los únicos. No se añadirán más fechas. Y tampoco tiene un plan maestro para después. O sí, porque cuando solo han pasado unos meses desde la publicación de su último disco, 'Greta Garbo', confiesa que ya tiene prácticamente listo otro: “Después del concierto de Zaragoza me pondré a grabarlo para que se publique lo más pronto posible”.
¿Cómo espera que sea el reencuentro con el público después de tanto tiempo? Bunbury admite que "existe esa cierta preocupación, pero realmente es algo que siempre he sentido. Es un gusanillo que está bien mantener". Había dudas sobre qué músicos le arroparían en su regreso a los directos, y el propio artista las ha despejado. A pesar de que no contó con ellos en su último álbum, serán Los Santos Inocentes, su banda habitual de los últimos años, quienes le acompañen, aunque con la incorporación de la aragonesa Erin Memento, que tocará la guitarra, los teclados y hará coros.
También ha anunciado que en los once recitales previstos habrá bandas que abrirán el espectáculo, aunque no ha querido desvelar sus nombres de momento, y ha reconocido que sobre la mesa está la posibilidad de tener artistas invitados en cada show, pero sin llegar a confirmarlo. "No quiero sentirlo como obligatorio, solo será si artísticamente funciona. Puede ser que haya o puede que no".
Otro tema sobre el que hablado el cantante es el de los precios de las entradas y la cada vez más extendida costumbre de fijar importes distintos según la zona de la pista. "Si haces diferentes zonas para que existan diferentes precios y que pueda haber diferente posibilidad de accesibilidad al concierto, es lógico que una va a ser más barata y otra va a ser más cara; y lo lógico es que las más caras sean las más cercanas y las más baratas sean las más lejanas, no acabamos de descubrir el fuego".
Para Bunbury, en realidad, es una cuestión de punto de vista: "De alguna forma es facilitar a quien menos tiene que tenga una zona, en vez de equiparar y poner todos los precios exactamente igual".