Oasis la lía antes de siquiera volver a ensayar: las entradas salen a a venta en medio del caos y quejas por los precios

Historia de la música contemporánea: la penúltima encarnación del punk británico ocurrió de manera inesperada a mediados de los noventa de la mano de dos tarados de Manchester enfundados en parkas y amantes de los Beatles. Cerveceo, barras bravas y working class mancunianos de estirpe irlandesa. Podían haber sido protas de una novela de Irvine Welsh o de Nick Hornby. Lo tenían todo para triunfar y triunfaron. Porque si algo nos ha enseñado la historia, es que los tarados también pueden ser poetas (o los poetas también pueden ser tarados, que no es lo mismo pero es igual) y que eso, el punk, hacía ya tiempo que había dejado de ser aquello de los tres acordes y podía transitar por lo melódico sin complejos.

Hablamos, claro, de Oasis, o de los hermanos Gallagher, Noel (compositor, guitarrista y voz) y Liam (vocalista principal), cinco años menor y quien, según propia confesión, cuando tenía unos 14 años se meó en el nuevo equipo de sonido de su hermano mayor, que tenía entonces 19, iniciando uno de las mayores y menos intelectualizadas broncas entre artistas de todos los tiempos. Empezó con una meada, siguió con el derrotero habitual de egos exasperados por el alcohol y las drogas (¡de todo esto hace ya 15 años!) y ha acabado, al parecer, con una caja de bombones. Todo lo suficientemente cutre como para estar a la altura de dos figuras del rock de talla mundial.

Las entradas: la importancia de (no) ser vago

Te va a tocar espabilar si estás pensando en asegurar tu lugar en uno de los 14 conciertos que darán los Oasis el próximo verano. Mañana sábado 31 de agosto de 2024, a la 9:00 am del Reino Unido y 10:00 en la península, tienes que estar dándole al click si quieres hacer maletas. Si quieres ir específicamente a Dublín, ojo que las entradas se ponen a la venta un ahora ante, es decir a las 9:00, hora local. Si te la quieres jugar y esperar a que se decidan a ampliar la gira, no tienes que hacer nada. Salvo rezarle a todos los santos para que lo hagan e incluyan a España en el periplo. ¿Quién sabe? Como recordarán los fans, al menos Barcelona fue uno de los escenarios de las monumentales broncas de los hermanos que alguna vez sacaron a relucir los bates de béisbol para romperse fraternalmente la crisma en total estado de embriaguez.

El problema de los precios

Si Kurt Cobain levantara cabeza fliparía con este tema. Al malogrado cantante de Nirvana ya le escandalizaba que Madonna cobrara más de 50 dólares por concierto, por lo que los 80 y los 600 pavos que cuestan (de salida) las del retorno de Oasis le habrían volado la cabeza (perdón, perdón). Pero es que además desde ya los hoteles de las ciudades en las que se celebrarán los conciertos están subiendo los precios de manera desorbitada y establecimientos de Cardiff, Manchester, Londres, Edimburgo o Dublín, están duplicando y hasta triplicando sus precios debido a la amplísima demanda, llegando a costar una noche de hotel alrededor de 500 euros.

Se estima que el retorno de Oasis movilizará alrededor de 400 millones de euros el próximo verano, de los cuales los hermanos Gallagher obtendrán beneficios como para volver a pelearse y amistarse alguna vez más.

Puedes inscribirte y esperar tu turno en ticketmaster.co.uk, ticketmaster.ie y gigsandtours.com. Y si piensas ir con amigos recuerda que solo puedes comprar cuatro entradas por tarjeta bancaria. Toma tus previsiones.