1977. Domingo por la mañana. Tina Turner (1939), que entonces cuenta con 38 años, duerme plácidamente. Nunca se había sentido tan libre. Estaba bien lejos de su exmarido Ike Turner, que ejerció la violencia contra ella sin descanso durante el matrimonio. Había conseguido reconciliarse con una infancia infeliz en la que había sufrido el abandono de sus padres. Y estaba a punto de dejar a tras la ruina económica y una carrera estancada.
Le despierta por fin el sonido del despertador. Al cabo de unos minutos, se da cuenta de que es lunes y llega tarde a un ensayo con Cher para su programa de televisión. Pega un salto desde la cama, se viste con la misma ropa de la noche anterior, se salpica la cara con un poco de agua y se rocía con perfume. Para acallar el rugido de su estómago, coge una manzana. De camino escucha 'Evergreen' de Barbra Streisand. A pesar de su retraso, en la CBS están contentos de verla. El ensayo va a las mil maravillas.
Se marcha a comer a Farmers Market y más tarde a ver a unos amigos. Ahora se encuentra más feliz que por la mañana. Se monta en su Jaguar XKE Roaster que conduce por la autopista cuando, de repente, un agente de policía le para. Procura dejar a un lado los sentimientos de angustia, que desaparecen cuando el agente le comenta educadamente que se ha saltado un stop. Reconoce haberse distraído. Le perdona y Turner continúa su marcha.
Escucha a Carl Sagan en la radio. Pasa por una residencia de ancianos y allí ve a una mujer que le recuerda a su abuela Mama Georgie. Ese momento le hace pensar en que, desde ese momento, pasará más tiempo ayudando a los demás. Termina dedicándole una oración de agradecimiento a esa mujer por la que tan querida se sintió la artista de Tennessee. Un día aparentemente normal en Los Ángeles que la cantante, actriz y bailarina describe con sumo detalle en 'La felicidad nace de ti', donde comparte la historia de su viaje espiritual. Turner confiesa que aquella jornada le hizo viajar por los Diez Mundos de la tradición budista, una práctica que cambió su vida para siempre. Desde el estado inferior hasta el de iluminación, en el vídeo recorremos todos los reinos.
Tina Turner se llama en realidad Anna Mae Bullock. Su trayectoria artística arrancó en la década de los 60 como Ike & tina Turner Revue y puso fin cuando cumplió los 69. Ha vendido más de 200 millones de discos y más entradas de conciertos que cualquier otra artista en solitario en la historia. Actualmente, retirada de los escenario, disfruta de una vida en Suiza junto a su compañero, desde hace más de treinta y cuatro año, Erwin Bach.