En los últimos meses la actriz Brooke Shields, de 57 años, ha empezado a hablar de su vida y de los aspectos más oscuros que han sobrevolado su carrera. Hace solo unas semanas confesaba que en sus inicios, como modelo y niña sexualizada, fue violada por un productor. La intérprete se encuentra en plena promoción de su documental autobiográfico, ‘Pretty Baby’, que se estrena el próximo 3 de abril y, en una de las tantas entrevistas que está concediendo, ha explicado como su cameo en ‘Friends’ provocó un ataque de ira en el tenista Andre Agassi, su entonces pareja.
Nos ponemos en situación. La actriz participó en un capítulo de la segunda temporada de ‘Friends’ y compartía trama con Matt Leblanc, el mítico Joey Tribbiani. El personaje al que daba vida era Erika, una mujer que parecía una simple fan del doctor Drake Ramoray (aunque luego se descubre que pensaba que ese personaje ficticio era real), personaje que interpretaba en una serie Tribbiani, que era actor, y que acabó siendo una acosadora.
No parecía que hubiese nada raro en el rodaje ni en la trama, llevada siempre por el lado cómico, pero en una escena ella tenía que lamerle los dedos de una mano para demostrar que estaba completamente enamorada de él. Tal y como ha relatado a The New Yorker, “Andre estaba entre la audiencia apoyándome y salió furioso. Me dijo: ‘Todo el mundo se está burlando de mí. Me dejaste en ridículo con ese comportamiento’”.
La protagonista de ‘El lago azul’ le intentó hacer ver que era ficción, una serie de comedia, pero la rabieta del que luego se convirtió en su marido fue a más y, al volver a casa, desató su ira “y destrozó todos sus trofeos”.
Brooke Shields reconoce que aquello le pilló totalmente por sorpresa hasta que después descubrió que el tenista había abusado de metanfetamina, él mismo lo reconoció en su autobiografía. “Más tarde me enteré de que él era adicto a la metanfetamina en ese momento, por lo que estoy segura de que el comportamiento irracional tuvo algo que ver con eso”, señala la actriz.
Realmente la escena casi no se emite, se decidió en el último momento. Esa parte se hizo durante el ensayo, Agassi estuvo presente durante todo el rodaje, y finalmente decidieron que no se repitiera, pero a Shields le pareció una escena divertida. “En la segunda toma me gritaron: ‘¡Shields, hazlo de nuevo!’ De repente, el ambiente cambió y todos estos hombres con traje comenzaron a entrar al estudio. Al día siguiente me preguntaron si quería hacer mi propio programa de televisión”, explicó la actriz, que tras ello le llegó la oferta de protagonizar ‘De repente, Susan’.
La relación de Shields y Agassi comenzó en 1993, pero no fue hasta 1997 cuando pasaron por el altar para luego divorciarse en 1999. Una relación que ella misma ha definido que fue tóxica. En sus memorias publicadas en 2014, la actriz expresaba que desde el día después de su boda “ya sabía que me había equivocado”.
Poco a poco llegó el fin de su relación entre la adicción de Agassi y el distanciamiento de ambos por el trabajo. “Me ignoraba cuando perdía y cuando ganaba se iba directo a otro campeonato. Cada vez nos distanciábamos más y más”, señaló en sus memorias. “Con el divorcio de Agassi me di cuenta de que quería que mi vida fuese diferente, pero debo decir que solo en los últimos 10 años he empezado a decir: ‘Esta soy yo y no quiero ser otra cosa’”, reflexiona Brooke Shields.