El 'scroll', en los 80 era tener en la mano un buen mazo de cromos y pasarlos de la parte superior de la 'baraja' a la parte inferior con un movimiento instintivo del pulgar y el índice. Sí, lo hace tu hijo todavía con los cromos de La Liga, pero en esa época eran las únicas imágenes que podíamos controlar. Y eso se queda: la nostalgia de los psicomotriz. Un montón de gestos decolorados.
Quizás por eso, como te contábamos aquí, solo en el año de la pandemia Panini -principal distribuidor de cromos actuales en el mercado español- facturó 25 millones de euros. Lo que no está nada mal. Pero un año antes llegó a ingresar hasta 56 millones de euros por esta rama, según datos recogidos por 'El independiente'.
Ahora, otra cosa son los cromos 'de verdad', es decir los que ya no se distribuyen masivamente y solo existen para solaz de ese espécimen melancólico y feliz conocido como 'el coleccionista'.
Carles Urpí, gerente de SuperCollectors, una tienda española especializada que en febrero cumplirá 10 años, contaba en un reportaje de El Mundo cómo se gestó la primera edición de la Iberian Trading Card Show hace unos días en Madrid. "Hemos trabajado mucho junto a mis compañeros de Sport Cards Center y de Euro Soccer Cards para conseguir hacer esta jornada a la que han acudido unos 60 vendedores y alrededor de 110 stands", señalaba Urpí, uno de los organizadores del que aspira a convertirse en el evento referencia del coleccionismo.
En el mismo reportaje del medio local, se recogen declaraciones del periodista deportivo Sergio Andrés, del canal de YouTube 'Drafteados', que asegura estar en busca de un cromo muy particular: "La que yo quiero es de Michael Jordan y cuesta más de 5.000 euros", señala.
Y aunque para algunos aún resulte sorprendente, basta mirar en las páginas de coleccionismo para darse cuenta de aunque hay cromos y paquetes de cormos que cuestan 14, 40 o 50 €, no es poco habitual que algunos alcancen varios cientos de euros. Y ya si abrimos la búsqueda a plataformas de e-comerce, las cantidades llegan a ser exorbitantes por cartas firmadas por estrellas globales, como el buen Michael. Ejemplo, este con rúbrica certificada que puedes encontrar en e-Bay por la friolera de 6.500 euros.
Aunque no es la más cara. Hay cromos vintage que superan cuestan varias decenas de miles de dólares. Y por un cromo del beisbolista Mickey Mantle, fechado en 1952, se llegó a pagar nada menos que 12,6 millones de euros. Para que luego digan que la recordar no cuesta nada.