Las playas son zonas de uso público. Mayores y pequeños disfrutan de estas zonas junto a familiares y amigos. Por ello, es importante mantener la zona de baño y descanso limpia y apta para la utilización por parte de cualquier persona que quiera dar un paseo, darse un chapuzón o simplemente relajarse al lado del mar.
Los ayuntamientos tienen potestad de regular el uso de las playas con sus propias normativas. En esas ordenanzas municipales, cada ayuntamiento establece un grado de infracción sobre las prohibiciones en las playas. La Ley de Costas, se ejerce en consonancia con las ordenanzas que los distintos municipios a los que pertenecen las playas. De esta manera, aunque en cada sitio las prohibiciones y reglas serán distintas, todas las playas comparten una serie de normas comunes.
Unas leyes que tienen por objeto la determinación, protección, utilización y política del dominio público marítimo-terrestre y especialmente de la ribera del mar. Así se establece que las playas estarán "para los usos comunes y acordes con la naturaleza de aquél, tales como pasear, estar, bañarse, navegar, embarcar y desembarcar, varar, pescar, coger plantas y mariscos y otros actos semejantes que no requieran obras e instalaciones de ningún tipo y que se realicen de acuerdo con las leyes y reglamentos o normas aprobadas conforme a la Ley de Costas 22/1988.”
Te contamos cuáles son las actividades que pueden conllevar multas en las costas de nuestro país: estas van desde fumar hasta dejar la sombrilla para guardar un hueco lo más cerca posible del agua del mar.
Aunque es habitual encontrarse con bañistas que disfrutan de su música a través de los altavoces, muchos ayuntamientos en la costa española penalizan esta acción. Reproducir canciones a través de estos dispositivos está penalizado con multas de 700 euros, que podrían aumentar si el infractor es reincidente. En Cantabria, Murcia y Cartagena, se aplica esta sanción en zonas cercanas a la playa también. Otros municipios son más permisivos, pero recomiendan el uso de auriculares para no molestar a las personas de alrededor, como en Valencia. Por su parte, la Policía Local de Chipiona, en Cádiz, lanzó una campaña en redes contra la contaminación acústica.
A pesar de que no está vigente en todo el litoral, en Benidorm hay una prohibición de jugar a las palas dentro del agua, acción que está sancionada con multas de entre 700 y 3.000 euros. Por otro lado, en la localidad murciana de San Javier, tampoco está permitido jugar con palas o un balón cuando puede molestar o dañar a terceros. Asimismo, en Arona y Arico, las playas canarias, no se puede construir grandes estructuras de arenas, aunque sí están permitidos los castillos.
Según la Ley de Costas, acampar en la playa está prohibido, del mismo modo que estacionar y circular con un vehículo no autorizado. De hecho, dormir en la playa puede suponer una multa de hasta 1.500 euros en lugares como la playa de San Pedro del Pinatar, en Murcia. Al igual que hacer una barbacoa sin autorización en el monte es ilegal, en la playa también. Y por ello, se pueden imponer multas de hasta 3.000 euros. Por otro lado, tampoco se puede reservar sitio en la arena poniendo la sombrilla y la toalla, acción que está penalizada en Cullera, Valencia.
Queda prohibido y es considerado como ilegal en todas las playas españolas el ducharse con champú y jabón en las duchas públicas. En caso de incumplimiento deberán de pagarse 750 euros. Esto se hace debido a que el agua del mar puede quedar contaminada, volviéndose turbia por culpa de los productos
En ciertas zonas costeras se pueden poner multas de hasta 3.000 euros por hacer una barbacoa sin autorización previa.
No en todas, pero, en muchas playas queda terminantemente prohibido orinar en el agua del mar. En Vigo por ejemplo, puede ser sancionado con 750 euros.
Aunque bañarse en el mar con bandera roja no está recomendado para evitar tener incidentes con las mareas o con algunos animales visitantes, pocos saben que también puede ser objeto de castigo. Y es que la mayoría de los municipios de nuestras costas recogen en sus reglamentos esta limitación con sanciones bastante elevadas: llegan hasta los 3.000 euros.
En Cunit, localidad tarraconense, la multa por hacerlo puede ir desde los 1.501 a los 3.000 euros. Una cifra muy similar a la que tiene fijado Ibiza por este tipo de acciones, de 1.500 hasta 3.000 euros. También Gandía, en la provincia de Valencia, se indica esta prohibición, con sanciones que van de 751 hasta los 1.500 euros ya que se considera una infracción grave.