Ir al supermercado y decantarnos por una caja de huevos suele ir relacionado con la fecha de caducidad y si acaso por lo que nos venden en la etiqueta, si son camperos o ecológicos, por ejemplo. Pero lo cierto es que un huevo nos puede dar más información de la que creemos con solo mirarlo, y no precisamente porque su color sea más o menos claro. Más bien nos referimos al código que viene impreso en su cáscara y al que en la mayoría de los casos no prestamos atención, pero que nos dice algunas de las características del producto que estás metiendo en la cesta de la compra.
El código es una combinación de números y letras, pero verdaderamente lo que más nos interesa es el primer dígito, el cual explica el sistema por el que se han criado las gallinas que han puesto esos huevos. Este número puede ser 0, 1, 2 o 3, siendo la menor cifra la mejor considerada y la mayor la peor. Te lo explicamos.
Cuando el primer número es un 3 significa que esas gallinas se han criado en jaulas, aunque la normativa obliga a que estas estén acondicionadas de una forma específica. A pesar de que deben cumplir con ciertos requisitos, la superficie mínima no deja de ser 2000 centímetros cuadrados, con un nido y espacio para picotear y escarbar. No obstante, como muchos medios han puesto en más de una ocasión en conocimiento, las gallinas se encuentran bajo luz artificial para estimular que pongan huevos y no pueden moverse tranquilamente por el exterior.
En caso de que lleven el número 2 significa que han sido gallinas criadas en suelo que, a priori, suena bien porque no están encerradas en una jaula, pero tampoco han estado al aire libre. Los espacios en los que se mantienen son limitados, de nueve gallinas por metro cuadrado, no obstante, pueden colocarlas por niveles y en cada uno la zona es utilizable, por lo que la superficie termina multiplicándose.
Si llevan un 1 significa que los huevos provienen de gallinas camperas. Aquí ya hablamos de otra cosa. Cuentan con una superficie similar a la anterior, pero se encuentra en un nivel superior porque cuentan con un espacio exterior al que salir al aire libre durante todo el día.
Y si lo que quieres es comprar huevos ecológicos en lo que tienes que fijarte es en que lleve un 0 al comienzo, aunque para ser considerados dentro de esta categoría tienen que cumplir ciertos requisitos y condiciones. En este caso como máximo puede haber seis gallinas por metro cuadrado dentro del gallinero, además de contar con una alimentación en la que el 80% de lo que comen tiene que proceder de agricultura ecológica.
Según destaca la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), si llevan esta etiqueta también tienen restringido el uso de medicamentos en las gallinas, no permitiendo que se les corte el pico, salvo en casos excepcionales en los que sea necesario hacerlo.
En lo que respecta al resto del código, lo siguiente es una combinación de dos letras que por lo general es 'ES', lo que quiere decir que son huevos que proceden de España, mientras que el resto de número cuentan con un significado más específico.
De los ocho números restantes, los dos primeros se refieren al código de la provincia, los tres siguientes identifican al código del municipio y los tres últimos registran la granja de producción donde se han criado las gallinas. Además, aunque la mayoría llevan la fecha de consumo también impresa en la cáscara, es algo opcional, ya que la obligatoriedad de añadir su caducidad es en el envase.