La jubilación es uno de los momentos más importantes en las vidas de muchas personas. Ese instante en el que abandonamos la actividad profesional para emprender una etapa más tranquila (y disfrutona, por qué no) es crucial, pero para llegar a él algunos países ofrecen más facilidades que otros. Los sistemas de pensiones cambian en función del territorio. Por eso la consultora Mercer, especializada en estrategia y talento a nivel global, elabora cada año un informe sobre la situación de estos en los principales puntos del planeta.
La muestra analizada está formada por 47 países, de los que se comparan cuestiones como la seguridad financiera, el rumbo socioeconómico o la esperanza de vida. De ahí sale el ranking con los mejores sistemas de pensiones del mundo, en el cual España se sitúa hacia la mitad, a 20 puntos del podio, ocupado por los países nórdicos.
Países Bajos ocupa la primera posición de la tabla de Mercer con una puntuación de 85 sobre100, por encima de Islandia (83,5) y Dinamarca (81,3). Los expertos sostienen que la reforma de las pensiones que llevó a cabo el Gobierno holandés permite disfrutar de un enfoque más individual y personalizado en cada uno de los beneficiarios. Se destaca su nivel de prestaciones, su sostenibilidad, el porcentaje de participación y adecuación.
La sólida base de activos y la fuerte regulación son dos de los valores que sostienen este primer puesto. El sistema neerlandés combina las pensiones públicas a tanto alzado con los planes profesionales, habitualmente asociados a los convenios colectivos. Para mejorar, los especialistas indican que Países Bajos tendría que reducir el nivel de endeudamiento de los hogares y retrasar la edad de jubilación.
Por su parte, Islandia tiene un sistema de pensiones mixto, con una partida básica estatal y otra complementaria, ambas dependientes del volumen de ingresos del núcleo familiar. El sistema danés tiene un funcionamiento bastante similar.
El Informe concluye que España, cuyo índice ha disminuido de un 61,8 en 2022 a un 61,6 en 2023, manteniendo el puesto 26 que también tenía en 2022, dispone de uno de los sistemas de pensiones más generosos, con las prestaciones más suficientes, además de bien gestionado, pero con una baja sostenibilidad financiera en el medio y largo plazo.
Su muy baja puntuación en el subíndice de sostenibilidad financiera del sistema, en la que ocupa el puesto 44 de 47 países analizados, sitúa a España por debajo de la mediana del ranking del índice general. Por el contrario, las pensiones de jubilación españolas se mantienen en las primeras posiciones, entre todos los sistemas estudiados, en la puntuación de la suficiencia e integridad del sistema de pensiones.