Los padres siempre quieren lo mejor para sus hijos. Esto es así. Trabajan para que, desde pequeños, puedan recibir la mejor educación posible y así puedan labrarse un gran futuro. Pero aunque pasen los años y los hijos se hagan mayores, siempre se intenta ayudarles en todo lo posible. Y más cuando llega el momento de independizarse. Esto momento, que cada vez es más complicado, hace que muchos acumulen años viviendo de alquier, pero hay un momento en el que se plantean la opción de comprarse su propia casa. Un sueño muchas veces lejano, al que los padres, en la medida de lo posible, intentan ayudar a cumplirlo. Pero, ¿cómo?
Te hablamos de las donaciones para su hipoteca. En ocasiones los padres van creando un colchón económico con el que en un futuro ayudar a sus hijos a tener su propio hogar. Y cuando llega el momento, es normal que empiecen a surgir las dudas. ¿Habrá que declarar a hacienda? ¿Habrá que pagar impuestos? Descubre cómo es la mejor forma de hacerlo.
Lo primero que debes tener claro es saber qué es una donación, pues no es lo mismo donar que hacerle un préstamo a tu hijo. Son términos totalmente distintos. La donación es una entrega de bienes o servicios de forma totalmente voluntaria, gratuita, por lo que no esperas nada a cambio. Pero en el préstamo, aunque tú le des el dinero voluntariamente a tu hijo, este tendrá que devolvértelo poco a poco hasta que la deuda quede saldada.
Ahora bien, mucho cuidado. Porque lo normal es que creas que existe un mínimo para declarar las donaciones que se realizan. Pues lo cierto es que no, al parecer da igual la cantidad que se done, por pequeña que sea, se debe tributar. Como si son esos 100€ que le dejas para llegar a fin de mes. Eso sí, según estipula el artículo 636 del Código Civil, no se puede obtener por donación más de lo que se pueda dar o recibir por testamento. Por lo que esta donación no deja de ser un adelanto de la futura herencia.
Cuando decides entregarle como donación a tu hijo parte de tu dinero para comprarse una casa o hacer frente a una hipoteca, esta se liquida a través del Impuesto de Sucesiones y Donaciones. Pero, ¿quién debe pagar ese impuesto? Pues aquel que recibe el dinero, en este caso, tu hijo. La gran pregunta en este momento es cuánto vas a tener que pagar por haber recibido una donación de tus padres.
Bien, todo depende de la Comunidad Autónoma, pues la competencia sobre ese impuesto está cedida a ellas. El impuesto sobre las donaciones no es igual en toda España, por lo que dependiendo del lugar en el que se realice será una cantidad u otra.
Por ejemplo, Madrid es una de las comunidades en la que es más barato realizar una donación siempre que el destinatario sea descendiente, como un hijo, el cónyuge o ascendientes. En estos casos la bonificación será de un 99% siempre que se haya hecho a través de un documento público. En aquellos casos que la donación se produzca en metálico, se debe justificar la procedencia de ese dinero.
Una donación no es algo que se deba tomar a la ligera, es un proceso tributario más que se puede entender como adelanto de la futura herencia a tu hijo que se utiliza como ayuda para él en un determinado momento.