Los problemas financieros de Robert de Niro: el actor vende su hotel de lujo de Barcelona
El protagonista de Taxi Driver se desprende del que iba a ser el referente de su cadena hotelera en Europa menos de dos años después de su inauguración
La crisis de la hostelería, la paralización de los rodajes y su alto nivel de vida amenazan con arruinar al actor
Todos sabemos que los grandes actores tienen fuentes de ingresos que van más allá de la actuación, y si no, mirad a Robert De Niro. El famoso actor de Taxi Driver, El Padrino o la reciente El Irlandés, se ha convertido en todo un magnate del sector hotelero con su cadena Nobu Hospitality, una compañía especializada en hoteles de lujo fundada en 2013 con el chef japonés Nobu Matsuhisa y el productor de cine Meir Teper.
Hasta ahora, esta exclusiva firma sumaba cuatro hoteles en Europa, pero la crisis económica por la Covid-19 ha obligado al reconocido actor a desprenderse de su hotel de Barcelona, el Nobu Hotel Barcelona, una decisión que parece profetizar el rumbo del sector para este 2021.
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Futuro truncado
Inaugurado en septiembre de 2019, el Nobu Hotel Barcelona estaba llamado a convertirse en el referente de la cadena en Europa. Situado en la icónica Torre de Cataluña, sus 259 habitaciones y suites repartidas en más de una veintena de plantas y su prestigioso restaurante, donde se podían degustar los platos de su socio Matsuhisa y disfrutar de grandes vistas de la ciudad condal, parecían augurarle un futuro brillante, pero la grave crisis del coronavirus ha puesto fin a su andadura menos de dos años después de su apertura al público.
Por 80 millones de euros, de Niro, que para este proyecto se había asociado con la cadena Selenta Group, ha vendido el hotel a la gestora de fondos ASG, una cifra considerable que sin embargo reduce en 20 millones el precio inicial de venta.
Problemas económicos
El reconocido actor parece estar viviendo con dureza la crisis económica del coronavirus, algo que no es de extrañar considerando que en Estados Unidos, uno de los países que más ha sufrido la pandemia, posee varios establecimientos dedicados al sector de la hostelería: el hotel de lujo Greenwich y los más de cuarenta restaurantes de la marca Nobu, todos ello afectados por los cierres por la Covid-19.
Las pérdidas son tales que el actor, cuyo patrimonio asciende a 500 millones de euros, tuvo que recurrir a las ayudas del Programa de Protección de Pagos de Estados Unidos para pequeñas empresas, una decisión por la que recibió 14 préstamos con un valor de entre 11 y 28 millones y por la que fue duramente criticado.
Pero más allá de sus problemas con sus negocios hosteleros, de Niro también se ha visto afectado por los parones y cancelaciones de rodajes del sector cinematográfico. Su gran proyecto para 2020, “Killers of the Flower Moon”, la nueva película de Scorsese en la que volverá a encontrarse con Leonardo Dicaprio, se ha visto retrasado y no comenzara a rodarse hasta febrero, casi un año más tarde de lo previsto.
Como consecuencia, se estima que el actor habría ingresado menos de seis millones de dólares en 2020, una cantidad altísima para el común de los mortales que no alcanzaría a costear el lujosísimo nivel de vida del actor, que, como ocurre con otras grandes estrellas, jamás se ha privado de nada.
Su costosísimo divorcio
Los problemas financieros del actor habrían afectado incluso a su divorcio con la actriz Grace Hightower, con la que estuvo casado entre 1997 y 2018 y con la que tiene dos hijos en común. Y es que las pérdidas que ha ido experimentando desde el inicio de la pandemia le habrían obligado a reducir el crédito mensual de la tarjeta de su ex-esposa de 100.000 dólares a 50.000, según alegaron sus representantes durante un juicio celebrado en julio de 2020, algo que los abogados de Hightower no aceptan.
En su momento, la Corte Suprema decidió que De Niro mantuviese el límite inferior de la tarjeta, pero que tendría que pagar 75.000 dólares mensuales a su ex-esposa mientras buscaba una residencia de verano para sus hijos, pero el divorcio aún no está cerrado.