Buenas noticias para la población general y algo peores para los mayores de 50. El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha publicado la Encuesta de Población Activa (EPA) del tercer trimestre de 2021. Según el informe, el número de ocupados, por primera vez desde 2008, supera los 20 millones, experimentando un crecimiento de 359.300 en el último trimestre y, de más de 850.000 personas en el último año.
La tasa de paro de la población menor de 25 años se ha reducido en un 7,23%. La cifra, sin embargo, sigue siendo preocupante, ya que el 31,15% de este grupo se encuentra en paro. El desempleo tiene consecuencias que afectan a las finanzas personales y a la salud emocional. La obtención de empleo es una expectativa social y cultural adquirida desde la infancia. La dificultad de encontrar empleo entre los más jóvenes implica un retraimiento marcado por la depresión, ansiedad, disminución de las relaciones sociales y pasividad. Además, los jóvenes desempleados no pueden tomar decisiones relevantes, lo que supone un retraso en las prácticas de transición a la sociedad adulta.
Pero en cuestión de desempleo, los mayores damnificados no son los jóvenes. Mientras que baja el paro total en España y, con ello, el paro juvenil, el desempleo entre los mayores de 50 años roza el millón de parados en España (999.900, el 29,26% del total), superando al sector de los jóvenes de entre 16 y 29 años en casi 30.000 personas.
Los datos de los seniors del tercer trimestre están en consonancia con los del segundo trimestre de la EPA. En ese momento, el paro total en España había crecido un 5,2% respecto al mismo periodo del año anterior (3.5 millones frente a 3.4 millones). Pero el desempleo de los trabajadores de más de 50 años había aumentado un 16% (947.000 frente a 817.000), más del triple que el nacional, y es casi el doble del alza (8,4%) del producido entre los jóvenes menores de 30 años (1.060 millones frente a 977.000).
Los mayores de 50 años están siendo, por tanto, los más afectados por el desempleo, pese a su experiencia y sus años de cotización, algo que también puede penalizarles frente a los trabajadores más jóvenes, más 'baratos' para los empleadores.
La Encuesta de Población Activa de este trimestre ofrece otros datos interesantes. La ocupación aumenta en los Servicios (377.200 ocupados más) y en la Industria (63.000), mientras que baja en la Agricultura (49.600 menos) y en la Construcción (–31.200). En variación anual la ocupación aumenta en todos los sectores: 739.100 ocupados más en los Servicios, 44.300 más en la Construcción, 40.400 en la Industria y 30.400 en la Agricultura.
El empleo crece este trimestre en la mayoría de comunidades autónomas. Los mayores aumentos se dan en Cataluña (62.300 más), Canarias (50.000) e Illes Balears (47.900). Por su parte, la ocupación desciende en Andalucía (–7.200) y en La Rioja (–2.100). En variación anual el empleo sube en todas las comunidades. Los mayores incrementos se producen en Andalucía (162.300 ocupados más), Cataluña (155.500) y Comunidad de Madrid (124.000).
Por sexo, el número de mujeres en paro disminuye en 95.100 este trimestre, situándose en 1.809.200. Entre los hombres, el desempleo se reduce en 32.000, hasta 1.607.500. La tasa de paro femenina baja un punto y se sitúa en el 16,36%. La masculina disminuye 41 centésimas y queda en el 12,97%.
Por último, si atendemos a la nacionalidad, el paro baja entre los españoles en 60.100 y disminuye entre los extranjeros en 67.000. La tasa de paro de la población española es del 13,47%, mientras que la de la población extranjera es del 21,74%.