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Si tienes un buen proyecto, esta es tu oportunidad. España va a recibir de Europa en los próximos cinco años 70.000 millones de euros a fondo perdido que el Gobierno tendrá que repartir. También podrá ofrecer otros 70.000 millones en créditos blandos, si fuera necesario más dinero. Según el presidente Pedro Sánchez es "el mayor esfuerzo inversor y reformista de nuestro país desde su ingreso en la Comunidad Económica Europea, hace 35 años". Todos estos millones se destinan al Plan de Transformación y Resiliencia, una hoja de ruta para cambiar el país en pocos años, y al que todos los ciudadanos están llamados a participar, incluidos los autónomos y las Pymes.
La secretaria general de Fondos Europeos del Ministerio de Hacienda, Mercedes Caballero, invita a todos los ciudadanos a conocer el Plan de Recuperación y Transformación, y a participar en él. “Absolutamente todo Plan contiene medidas transversales que afectan a múltiples sectores, y en todos los ámbitos de actuaciones hay un enfoque directo en pymes y autónomos. No puede ser de otra manera, porque nuestro tejido productivo es así” ha explicado Caballero en un foro económico organizado por ElDiario.es. También el secretario general del Departamento de Asuntos Económicos del Gobierno, Manuel de la Rocha, ha afirmado que "todas las licitaciones y las convocatorias para acceder a las ayudas del Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia español tendrán espacio para los autónomos y los pequeños negocios, que van a ser los grandes beneficiarios del Plan".
No todos piensan así. Juan Carlos Higueras, analista económico y profesor de EAE Business School, considera que es difícil que haya un impacto directo de los fondos europeos sobre pymes y autónomos, aunque precisa que sí se conseguirá un impacto indirecto a través de subcontratas. "Difícilmente va a llegar de forma directa a los pequeños empresarios y debería llegarles, que son lo que realmente son los que tienen que reconstruir la red de la economía y puestos de empleo”, recalca.
Los fondos se repartirán o bien por licitaciones, o bien por subvenciones. Lo más fácil para un pequeño empresario o un autónomo es solicitar una subvención. Para ello lo primero que tienes que tener es un proyecto que encaje en las áreas de actuación previstas: transición ecológica, digitalización, cohesión territorial, e igualdad de género. Cada una de estas áreas se despliega en 10 grandes políticas, y cada política en varios componentes. Cualquier proyecto que persiga conseguir los objetivos contemplados en esta estructura es susceptible de ser financiado.
Para hacerte una idea, entre las pocas convocatorias cerradas ya se han aprobado ayudas a la organización de festivales de cine, o a proyectos para fijar población, pero echando un vistazo a las políticas y componentes del Plan las posibilidades son casi infinitas.
Las convocatorias marcan la tipología de los proyectos. Hay convocatorias que financian el 100% de la inversión, otras en cambio piden que el empresario ponga una parte. Son las distintas administraciones quienes hacen las convocatorias, y es allí donde se especifican los requisitos para participar. Todas las convocatorias se hacen públicas en la web que el Gobierno ha puesto en marcha, pero debes estar atento, una vez convocadas, hay un plazo de tiempo reducido para presentar proyectos.
La gran ventaja de estos fondos es que la financiación se consigue con subvenciones a fondo perdido. No se trata de créditos, no tienes que devolver el dinero. Eso sí, debes utilizarlo para cumplir con los objetivos especificados en tu proyecto, y cada convocatoria explica muy bien en qué puedes usar los fondos y en qué no. Deberás justificar cada euro recibido, y pueden obligarte a devolver lo invertido, si no lo haces.
El primer paso es entrar en la web oficial del Plan donde aparece toda la información necesaria y todas las convocatorias abiertas. Selecciona la convocatoria en la que pueda encajar su proyecto y atrévete. En este cuadro aparecen las líneas de actuación y los millones dedicados a cada una de ellas.
El dinero que llega es nuevo, pero los procesos para repartirlo no, y son endiabladamente complicados. Quien haya pedido alguna vez una subvención, lo sabe. Aunque se está haciendo un esfuerzo por simplificar los trámites, cada administración, cada ministerio, cada ayuntamiento, cada organismo convocante requiere formularios diferentes y trámites distintos, por lo que lo más conveniente es acudir a una consultoría especializada, ver si sus honorarios compensan, o negociar maneras de que su trabajo pueda ser financiado en parte con la subvención, todo depende del proyecto presentado y de los requisitos de la convocatoria.
Para navegar sin perderse en este mar de subvenciones lo mejor es seguir el Plan aprobado por el Gobierno y ver qué objetivos pueden ajustarse a tu línea de actividad. Dentro de cada componente se especifica qué actuaciones se financian y cuáles no. Cojamos por ejemplo la economía de los cuidados, se trata del componente 22 del Plan al que se destinan 2.500 millones de euros. Uno de los objetivos perseguidos dentro de este componente es "impulsar centros de día innovadores e integrados en la comunidad que permitan apoyos y cuidados en la proximidad del domicilio, favoreciendo también su desarrollo en áreas rurales".
Si eres emprendedor y conoces el negocio podrías presentar un proyecto para la puesta en marcha de un nuevo centro de estas características en un área rural.
Si ya eres una pyme y trabajas en el sector podrías presentar una reconversión de tu centro hacia uno que siguiera las directrices del modelo de atención centrada en la persona que quiere impulsar el Plan.
Si eres autónomo, podrás buscar sinergias y alianzas con cualquier empresa para presentar proyectos conjuntos, o buscar colaboraciones para participar en proyectos ya en marcha.
Una de las patas del Plan es el proyecto del Gobierno España Nación Emprendedora, que pretende impulsar la creación de nuevas empresas y facilitar el crecimiento de las pymes. También está previsto el lanzamiento de la Oficina Nacional de Emprendimiento, para coordinar y ordenar los servicios de apoyo al emprendimiento en colaboración con agentes públicos y privados.
El componente 13 del Plan está dedicado enteramente a las pymes. Van a abrirse convocatorias para subvenciones que financiarán digitalización, formación, y avales para desarrollo de proyectos.
El 29% de los fondos se van a dedicar a la digitalización de pymes y autónomos, esto significa que se abrirán muchas convocatorias que te permitirán adecuar su presencia digital a los tiempos que corren. Si tienes un comercio, podrás actualizar tu dimensión digital, no solo formándote para ello, sino aprovechando los fondos para que tu empresa de un salto al futuro.
Si estás decidido a sacar tu proyecto adelante hay otros canales a los que acudir en busca de ayuda. En el Sistema Nacional de Publicidad de Subvenciones y Ayudas Públicas del Ministerio de Hacienda aparecen todas, aunque la experiencia de navegación no es muy buena. También está el portal Ipyme del Ministerio de Industria, donde puedes acceder a las convocatorias específicas para empresas y autónomos. En el Sepe se anuncian incentivos como reducciones de la cuota de Seguridad Social o bonificaciones a la contratación. Muy consultados estos meses también han sido los portales del ICO o las Cámaras de Comercio.
En la CEOE tienen su propia Oficina Técnica de Apoyo para Proyectos Europeos, pero es de pago. También es muy importante conocer el portal de subvenciones comunitario. En la Comisión dan una serie de consejos para afrontar el paso de pedir un incentivo: “Empezar con tiempo, estudiar muy bien la convocatoria y confirmar que se cumplen los requisitos”. Además, cuando se rellene la solicitud, “se debe demostrar que la idea corresponde fielmente con lo que pide la convocatoria de la Comisión”, de modo que quede claro el valor añadido y diferencial de la idea. Y si no se consigue a la primera, hay que ser persistente, a veces hay que intentarlo más de una vez.
El EIC Accelerator, que apoya a pymes que tienen ideas pero que han tenido dificultades para acceder a financiación. En la primera etapa del proyecto, la empresa recibe una cantidad para desarrollar un plan de negocio viable y en definitiva, garantizar su éxito. En una segunda, se financia la propuesta en sí. También están los recursos europeos para obtener préstamos, microfinanciación, avales o capital riesgo. O líneas específicas para ciertos sectores, como el turístico.