La mejor forma de llevar a cabo una dieta saludable es lanzarse a cocinar en casa. Hay miles de recetas sencillísimas con las que resolver un menú diario equilibrado para toda la familia. Solo hay una única pega, por llamarlo de algún modo, y es el olor de ciertos alimentos cuando se cocinan. Desde Uppers vamos a descubrir el secreto de cómo eliminar el olor de comida en casa.
Los trucos sobre qué hacer para que mi casa no huela a comida son muy prácticos. Por un lado, se neutralizan esos olores fuertes que desprenden determinados ingredientes al cocerse, en el caso del repollo, o al freírse como sucede con los pescados. Por otro lado, se consigue que todos quieran probar cualquier plato independientemente de que su aroma resulte más intenso para comensales “delicados” o “petardos”. Además, a casi nadie le suele gustar que al entrar en casa huela a comida precisamente cuando no es la hora de comer o de cenar.
Para evitar el olor a comida es indispensable seguir estas indicaciones:
Además, hay una serie de trucos que ayudan a eliminar esos olores más intensos que desprenden ciertos alimentos o formas de cocinarlos y pueden resultar poco agradables. A continuación, explicamos cómo neutralizar cualquier olor de comida en casa:
Al hervir un poco de vinagre blanco en un cazo se desprenden unos vapores que consiguen acabar con ciertos olores como, por ejemplo, el de hacer un salmón a la plancha.
Echar una cantidad suficiente de canela en polvo en una fuente y meterla en el horno unos 15 minutos a temperatura media. Después sacar la fuente del horno y pasearse con ella por la cocina y por toda la casa. El aroma de la canela impregnará todas las estancias y conseguirá eliminar el olor a comida. Diluir canela en agua en un cazo y llevarla ebullición proporciona un resultado parecido.
El limón es un cítrico que también elimina los malos olores. Se puede calentar el zumo diluido en agua en una taza en el microondas o al fuego en un cacito. También produce el mismo efecto hervir en agua sus cáscaras. Como la canela o el vinagre, los vapores que desprenden el jugo o las cáscaras también acaban con los peores olores.
Las hojas de tomillo, romero y laurel sobre todo frescas son igualmente poderosas contra los malos olores. Al incorporar cualquiera de ellas a una olla con agua hirviendo se logra aromatizar la cocina. Otra forma es llenar un vaporizador con ese agua resultante una vez fría y colada tras la cocción de las hojas. Así se tiene disponible siempre que se necesite.
La vainilla tiene un olor intenso en comparación con los demás. Solo se necesita empapar un algodón en esencia de vainilla y colocarlo en un bol junto a la placa de guisar. Enseguida neutraliza cualquier otro olor por más que se haya hecho resistente.