James Rhodes se ofrece a pagar el alquiler de la mujer desahuciada por 88 euros: "Rechazan mi oferta y amenazan con demandarme"
Blanca, una barcelonesa de 78 años que lleva 50 viviendo de alquiler, puede ser desahuciada por una antigua deuda de 88 euros
El pianista británico afincado en España James Rhodes ha querido intermediar en el conflicto proponiendo unas ventajosas condiciones a la dueña de la vivienda, sin éxito
Según explica Rhodes en sus redes, se expone a una demanda por parte de los propietarios y no existen indicios de acuerdo
Blanca tiene 78 años y lleva más de 50 viviendo en su piso de Barcelona. Medio siglo pagando rigurosamente su alquiler, pero unas obras realizadas hace unos años en la vivienda le hicieron deudora de 88 euros, los mismos que, ahora, la propietaria de la casa esgrime como causa de desahucio. 88 euros no parecen mucho para una exigencia de tal calado. En medio de toda esta desproporción, el pianista James Rhodes ha querido mediar en el conflicto, como explica en su cuenta de Instagram.
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Rhodes y su particular 'Stop desahucios'
No es la primera vez que el músico da muestras de coraje. El pianista británico afincado en España y con nacionalidad española fue artífice de la Ley Rhodes, como se bautizó a la enmienda por la que, en 2021, se ampliaba el plazo de prescripción de los abusos sexuales en la Ley de protección a la infancia. El pianista celebró la corrección, tramitada durante el gobierno de Pedro Sánchez, como una "gran noticia".
Ahora, ha emprendido su particular campaña contra los desahucios tomando parte activa en el caso de Blanca. Según explica en su post de Instagram, cuando vio que estaba a punto de ser echada de la que había sido su casa durante toda una vida, se puso en contacto con el abogado de la causa y se ofreció a pagar el alquiler a precio de mercado.
Sin embargo, la propuesta cayó en saco roto. Y no solo eso, sino que se expone a una demanda. Así lo explica el propio Rhodes en sus redes: "Me ofrecí a pagar personalmente el alquiler de Blanca a precio de mercado (más o menos el doble que está pagando ahora), dos años de antelación y con un bono como incentivo. Para que la dueña tuviera el dinero que quería, Blanca podría seguir viviendo en su casa y todos podrían ser felices. El abogado, un tal José Martínez Callejón, rechazó mi oferta de plano y ahora ha amenazado con demandarme y ha respondido a mi último mensaje con: “Yo la ejerzo ganando pleitos para mis clientes y acatando sentencias judiciales. Usted, en cambio, ni siquiera sé a lo que se dedica y tampoco me interesa".
¿Gentrificación?
El objetivo de la propietaria del piso puede ser realquilarlo a otros inquilinos, ya sea como piso turístico o como vivienda habitual, a un precio mucho más alto que el que paga Blanca o el que podría pagar Rhodes. De la misma opinión es el pianista: "Parece claro que sólo les interesa convertir el piso en un piso turístico, sin importar el riesgo para Blanca, que es claramente vulnerable. Que rechazaran una oferta que les pagaría el precio del mercado y recurrieran a amenazas lo dice todo".
El músico admite que recurre a las redes para presionar a la opinión pública ante un contencioso que no solo afecta al derecho a la vivienda, sino a ciertas formas de edadismo. "Destaco este caso sólo por desesperación. Obviamente hacer las cosas en privado no funcionará. Mi esperanza es que poniendo algo de presión pública en la ecuación podamos encontrar una solución", concluye Rhodes.