{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Seguro que este confinamiento te ha hecho pensar. ¿De verdad este piso que compré con mi pareja para mi familia es en el que quiero vivir? ¿Y si me lanzo y busco el balcón y el jardín para poder respirar mejor? Si tienes un piso en el centro y quieres venderlo para cambiar de aires en otra vivienda con más espacio y lejos del ajetreo de la gran ciudad, te lo ponemos fácil: analizamos el mercado inmobiliario y consultamos a los expertos para responder a todas tus preguntas: ¿Cómo son los pisos más buscados? ¿Cuándo bajarán los precios? ¿Qué hago si aún no he terminado de pagar la hipoteca?
"Durante la cuarentena son muchos los españoles que se han dado cuenta de que viven en una vivienda que no les gusta y preferirían vivir en zonas menos céntricas a cambio de más metros cuadrados", analiza Fernando Encinar, jefe de estudios y uno de los fundadores de Idealista.
De hecho, cuatro de cada diez españoles quieren cambiarse de casa y un 20% de ellos ya se ha puesto a la tarea, según un estudio difundido por Uponor. Si tú también estás pensando en dar el salto, debes hacerte la pregunta del millón: ¿es un buen momento para vender mi primera vivienda y comprar otra más grande en las afueras? Los expertos coinciden: sí, pero depende. La lógica y los datos indican que los precios tienden a bajar pero para que la jugada salga bien hay que tener en cuenta otros factores.
Aunque la demanda cambia rápidamente al ritmo que marca la crisis sanitaria, los precios no han experimentado todavía grandes cambios. Muchos propietarios se resisten a las rebajas y las transacciones inmobiliarias están al ralentí, pero todo indica que tras el estancamiento entraremos en una fase de bajada de precios.
"Lo que más influye en la evolución de los precios no es tanto lo que los potenciales clientes demandan sino el ritmo de ventas. Ante la situación de incertidumbre económica se ha reducido el ritmo de transacciones inmobiliarias y eso frena la tendencia bajista", argumenta Ignacio Ortiz, director de investigación de mercados de la inmobiliaria Activum.
Para no correr riesgos financieros, la clave para muchas de las familias que se plantean el cambio es la venta del primer inmueble. Para ello, conviene estudiar la evolución del mercado en el barrio y la previsión de los próximos meses por si es mejor esperar a vender tu vivienda.
Si todavía estás pagando la hipoteca, los expertos de la inmobiliaria Solvia recomiendan vender primero, cancelar la deuda y solicitar un nuevo préstamo para hacer frente a la compra del nuevo hogar, aunque también existe la posibilidad de hacerse con una hipoteca puente o subrogar la hipoteca de tu casa actual al nuevo propietario.
Partes con ventaja si tienes cancelada ya tu hipoteca. Pero lo ideal para dar el salto es que encuentres el comprador adecuado para tu casa actual y ese nuevo hogar de tus sueños al mismo tiempo. Desde Solvia, recomiendan pactar en el contrato un plazo de venta determinado de cuatro a seis meses. Así tienes un comprador asegurado y algo de tiempo para hacer reformas y mudanzas al nuevo inmueble.
Para vender es muy importante la planificación. Es aconsejable contar con un buen intermediario que te asesore durante el proceso y debes valorar la realización de reformas que puedan revalorizar el inmueble. También debes tener a mano toda la documentación que puedan necesitar los interesados: planos, escrituras, certificados, suministros, recibo del IBI…
En cuanto a temas fiscales, hay que tener en cuenta gastos como el Impuesto a la Plusvalía Municipal -que depende de cada Ayuntamiento y se calcula en base al valor de la nueva propiedad- y los gastos de escritura o si decides contar con un intermediario, los honorarios correspondientes a la inmobiliaria.
En el caso de la declaración de la renta, como se trata de reinvertir en la vivienda habitual, estarás exento de pagar el impuesto de compraventa, siempre que lo que ganes se reinvierta en la adquisición del nuevo inmueble.
El coronavirus ha cambiado nuestras prioridades a la hora de buscar casa. El nuevo retrato robot de las viviendas más buscadas tiene tres constantes: terraza o jardín, fuera del centro y, preferentemente, con un despacho para teletrabajar.
En consecuencia, las inmobiliarias han detectado un aumento de consultas sobre viviendas en el extrarradio de las grandes ciudades, lugares con menos aglomeraciones que permiten un estilo de vida distinto. "Ya no importa tanto vivir cerca de la oficina cuando el teletrabajo total o parcial se va imponiendo en muchos sectores", argumenta Ignacio Ortiz, director de investigación de mercados en Activum.
Al encanto de las afueras se une un creciente interés por los pequeños municipios. Los pueblos de menos de 5.000 habitantes concentran más de un 13% de las búsquedas de compra de vivienda y antes de la crisis sanitaria esta cifra no llegaba al 10%. Quizá sea muy pronto para hablar de un éxodo al pueblo pero el apetito de vivir en localidades pequeñas es ya una tendencia que ha crecido en todas las comunidades autónomas, especialmente en Castilla y León y Castilla-La Mancha, donde las búsquedas en Idealista han crecido hasta un 33% y 43%, respectivamente.
Los precios moderados rematan el tirón inmobiliario de estas ubicaciones. Comprar casa en un municipio de menos de 5.000 habitantes es un 52% más barato que la media nacional. Y los mayores chollos están en los pueblos de las grandes ciudades como Barcelona, Madrid, Sevilla o San Sebastián. Por ejemplo, comprar casa en Robledo de Chavela, a 63 kilómetros de Madrid, es hasta un 68% más barato que en la capital.
Para muchos compradores e inquilinos, tener un balcón o un ático ha pasado de ser una aspiración a una prioridad, o incluso una necesidad. La demanda de pisos con estas características comienza a dispararse hasta tal punto que las nuevas promociones inmobiliarias valoran adaptar su oferta a las nuevas circunstancias.
"Recomendamos terrazas a los arquitectos en todos los nuevos proyectos, espacios abiertos y generosos en los interiores y versatilidad para convertir en despacho uno de los dormitorios", relata Ignacio Ortiz, de Activum. No será el único cambio en el diseño viviendas postpandémicas. Según este experto inmobiliario, habrá más casas con dos cuartos de baño para facilitar los aislamientos por enfermedades contagiosas y crecerán las despensas para hacer compras más grandes