Las hormigas pueden aparecer en casa en cualquier momento. La falta de higiene es uno de los motivos que propicia su aparición, así como los restos de comida acumulados en el cubo de basura, las migas de pan en el suelo, sustancias líquidas pegadas al suelo… lo primero es prevenir que salgan y eso se consigue cortándoles el paso cerrando las grietas que puedan existir en tu casa y procurando no dejar ni resto de comida al alcance de las hormigas.
Se recomienda lavar los platos al acabar de comer, ya que las sobras pueden atraer hormigas hacia el fregadero, donde además encontrarían agua, clave para su supervivencia. Limpiar bien los armarios y estantes, y guardar en recipientes herméticos los dulces como la miel o el azúcar son otras técnicas para mantener las hormigas alejadas del hogar. Una vez que están dentro lo mejor es eliminarlas definitivamente y para ello hay miles de maneras efectivas. Te damos algunos trucos infalibles para acabar con las hormigas:
Estos productos permiten aplicar el insecticida directamente sobre las hormigas o en las áreas donde se encuentran. Algunos aerosoles, tienen fórmulas específicas para hormigas y cucarachas, y proporcionan un control rápido y efectivo.
Trampas
Las trampas para hormigas son una forma sencilla y discreta de eliminar hormigas en interiores. Estas trampas contienen un cebo que atrae a las hormigas y las mantiene atrapadas en su interior. Son muy eficaces y fáciles de usar.
Polvos insecticidas
Los polvos insecticidas pueden ser aplicados en grietas, hendiduras y otros lugares donde las hormigas puedan esconderse. Algunos polvos son específicos contra hormigas carpinteras y otros tipos de hormigas que anidan en la madera.
Remedios naturales
Desde 'Hama control de plagas', recomiendan los siguientes remedios caseros:
Vinagre: Las hormigas no soportan el olor a vinagre, puedes mezclarlo con agua y rociarlo por las zonas donde se encuentran habitualmente.
Limón: Ocurre lo mismo que con el vinagre. Si prefieres este olor al del vinagre, puedes elegir este remedio.
Olores llamativos: Con olores como la menta, el laurel, el ajo o incluso los granos de café podemos repeler a las hormigas. Guárdalos en saquitos de tela y escóndelos por los rincones de la casa.
Tiza y polvos de talco: La tiza y los polvos de talco también sirven para ahuyentar a estos insectos. La forma más eficiente de usarlo es esparcirlos en los puntos de acceso, ya que, si intentamos marcar todo su recorrido, seguramente acabemos con la casa sucia por el polvo.
Bicarbonato con azúcar: También funciona mezclar a partes iguales bicarbonato de sodio y azúcar. Es una mezcla nociva para las hormigas, por lo que, echándola por sus zonas de paso, abandonarán tu casa en poco tiempo.
Harina de maíz: Además de interrumpir los rastros de olor de las hormigas, provoca su muerte ya que los insectos son incapaces de digerirla.
Cítricos y cáscaras de pepino: Las hormigas las evitan, ya que al descomponerse se vuelven tóxicas para ellas.
Ajo, granos de café, laurel, menta u otras hierbas y especias: depositarlos en puntos estratégicos de tu vivienda espantará a las hormigas, que repudian el olor de estos alimentos.
Bórax: La mezcla entre este alimento químico con agua y azúcar forma una masilla que sirve para taponar los posibles huecos por los que circulan las hormigas y así, impedirles el paso.
Jabón líquido y aceite esencial de árbol de té: Mezcla unas gotas de aceite esencial de árbol de té con jabón líquido y agua. Rocía la solución en las áreas donde las hormigas suelen aparecer. Esta mezcla actúa como un repelente natural y es segura para usar en interiores.
Agua hervida: Si encontramos un agujero de hormigas cerca de las habitaciones o la cocina, se puede verter agua hirviendo en el interior. Aunque parezcan pequeños, los agujeros contienen colonias inmensas de hormigas.