Barre: la nueva modalidad de fitness que la cuarentena ha puesto de moda

  • Se ha hecho popular durante el confinamiento y va a convertirse en un clásico del fitness al combinar yoga, pilates y ballet, y prometer un cuerpo más elástico, resistente y elegante. Hablamos del barre

En casa, en tu momento-confinamiento, estás haciendo de todo para mantener la silueta, el tono muscular y todo aquello que nos hace vernos y sentirnos bien. Ahora estás en plena 'desescalada', pero sigues pasando la mayor parte del tiempo en casa, y sigues necesitando una rutina de ejercicios. Una de las últimas tendencias es el barre, una disciplina (nada que ver con la tarea doméstica) que promete hacernos ganar flexibilidad, moldear la figura y mejorar los hábitos posturales, los mismos que pueden degenerar en contracturas o arruinarte el tipo. El entrenamiento Barre también nos hace ganar resistencia y ganar elegancia, un concepto a veces olvidado en los trainings de gimnasio.

Yoga + pilates + ballet = Barre

Has deducido bien: el barre combina assanas de yoga con técnicas de Pilates y ejercicios clásicos de ballet. Por ello, la clásica barra de ballet es la principal protagonista para el entrenamiento. Su nombre viene, de hecho, del francés ‘barre’, que significa ‘barra’. Se utiliza para apoyarnos sobre ella y mantener el equilibro mientras hacemos diferentes ejercicios. Durante la cuarentena, la barra de ballet puede pasar a ser sustituida por una silla, aunque ya se venden online barras plegables de apoyo.

El entrenamiento se basa en ejercicios isométricos e isotónicos. Esto quiere decir que mantenemos nuestro cuerpo quieto y en tensión mientras se trabaja la musculatura, especialmente con estiramientos. En algún caso, si la forma física lo permite y no hay lesiones previas, pueden utilizarse mancuernas o pelotas, aunque no es lo más importante de la disciplina.

El barre es un método de fitness muy completo porque reúne ejercicios de fuerza y, como en cualquier danza, también de cardio, lo que significa que quemamos calorías. Pese a que puede parecer, una práctica suave por incorporar coreografía de ballet, quien lo ha probado que es una práctica exigente, en la que hay un gran gasto energético importante. Eso mismo es lo que le hace tan útil.

Los resultados comienzan a verse tras varios entrenos: pérdida de grasa y aumento de fibra muscular. A su favor también cuenta que se adapta a todos los niveles físicos, a todos los estados y a todas las edades. De hecho, el Barre es especialmente valioso para las personas de mayor edad. Veamos cuáles son sus beneficios.

1. Tonifica los músculos

Durante una clase de Barre definimos nuestros músculos, especialmente gemelos, muslos y brazos, y los del tren superior, como el abdomen y la espalda, dos partes del cuerpo muy sensibles entre los mayores: el abdomen suele distendirse con facilidad y la espalda es uno de los motivos de consulta médica más frecuente.

2. Corrige la postura

Una mala postura corporal de manera prolongada provoca dolorosas contracturas y nos hace andar encorvados. Abrir el plexo solar (zona del pecho y clavículas), uno de los objetivos clásicos del yoga, y mantener recta la columna son también algunos de los objetivos del barre. Con ello evitaremos dolores de espalda, mejor porte y, según el yoga, manejar mejor nuestras emociones.

3. Gana resistencia

El Barre es un entrenamiento dinámicos, con múltiples posturas y posiciones corporales. También combina movimientos estáticos en el que ejercemos presión con nuestro propio cuerpo. Cuando sentimos que el músculo empieza a temblar y debemos tensarlo para mantener la posición es que estamos haciendo una práctica modélica.

4. Aumenta la flexibilidad

La flexibilidad es el talón de Aquiles de los seniors. Con los años, los músculos tienden a acortarse y a perder movimiento. Por eso el barre es tan adecuado para las personas de mayor edad. Hay que ser paciente porque la flexibilidad no se gana de un día para otro, pero el mero hecho de estirarnos es bueno para desentumecer y alargar la musculatura.

5. Beneficios emocionales: reduce el estrés

Al igual que con el pilates o el yoga, el barre también ofrece beneficios emocionales. Nos conecta con el presente a través de los movimientos de nuestro cuerpo y de la respiración. Ayuda a oxigenarnos y genera endorfinas que van más allá del momento del entrenamiento. Por ello, ayuda a despejar la mente, alivia tensiones, reduce el estrés y es un excelente vehículo de bienestar.