Ya tenemos el buen tiempo encima y queremos cambiar nuestras rutinas incluyendo las comidas. Cocinar a la barbacoa es una estrategia estupenda para que el cocinero salga su encierro solitario en la cocina. Además, hay propuestas para todos los gustos porque a la barbacoa quedan deliciosas las verduras, cualquier tipo de carnes, los pescados y hasta algunos mariscos. A falta de jardín o patio en Uppers nos preguntamos si se puede hacer una barbacoa en un balcón o terraza.
Actualmente no existe una normativa municipal que desarrolle la posibilidad de encender fuego en una barbacoa que hayamos colocado en nuestra terraza o en el balcón. Por tanto, no está permitido y tampoco está prohibido porque su uso no está regulado ni siquiera en cuanto a prevención de incendios. El caso es que se trata de una actividad que se va a realizar en un espacio privado de nuestra casa, y lo más probable es que afecte a los vecinos del bloque.
De este modo, son las comunidades de propietarios las únicas con capacidad para definir una normativa en cuanto a la realización de barbacoas, tanto en las áreas privadas que serían los balcones y terrazas, como en las zonas comunes: jardín comunitario, pistas deportivas, piscina, azotea, etcétera.
La Ley de Propiedad Horizontal, en su artículo 7.2 dice que “al propietario y al ocupante del piso o local no les está permitido desarrollar en él o en el resto del inmueble actividades prohibidas en los estatutos, que resulten dañosas para la finca o que contravengan las disposiciones generales sobre actividades molestas, insalubres, nocivas, peligrosas o ilícitas”. Así, cuando se enciende una barbacoa en una terraza, otro vecino tiene en su mano acudir al presidente de la comunidad solicitando que se apague por resultar molesta y hasta peligrosa, independientemente de que los propios estatutos de la comunidad hayan desarrollado un punto al respecto.
Una circunstancia habitual es que si no existe un estatuto comunitario que regule la utilización de barbacoas en las zonas privadas o comunes, en cuanto un propietario enciende la primera se abre la discusión entre vecinos detractores y defensores hasta que se dejan por escrito unas normas en la siguiente junta.
El carbón con el que se cocina a la barbacoa genera llama y esa llama es un riesgo importante de incendio con posibles consecuencias desastrosas. Con esto no queda más remedio que consultar con los vecinos y los estatutos. Si están de acuerdo en la realización de barbacoas o así se ha regulado, la primera condición es cocinar con seguridad, una premisa que es la que manda en cualquier entorno: en la azotea, en la terraza, en el jardín, en la casa del pueblo…
Los expertos en la materia aseguran que las brasas de una barbacoa son peligrosas y nunca hay que confiarse. El crepitar de la llama a veces hace saltar un trozo de carbón ardiendo al igual que un golpe de viento. Ese carbón ardiendo puede acabar junto a un área con hojas secas, un cojín, unos visillos… y prender.
Estas son las reglas para encender una barbacoa:
A la hora de elegir el espacio donde encender la barbacoa, lo más seguro es la azotea en los bloques de pisos, si son practicables y lo permite la comunidad. La terraza es un buen lugar si reúne ciertas condiciones: grande, de techo alto y muy despejada. Hay que evitar que alrededor de la barbacoa haya muebles, utensilios o adornos, a los que salte una chispa que los queme. Lo que se desaconseja es hacerla en un balcón por sus pequeñas dimensiones y donde es difícil evitar que caigan brasas a la calle o dentro de casa.
En el mercado existen muchos tipos de barbacoas portátiles y por seguridad lo mejor es elegir aquellas que tengan tapa e incluso tiro para controlar el humo. También se comercializan otras más pequeñas y ligeras, sin patas ni ruedas para colocar sobre una mesa. Algunos modelos incorporan un sistema de ventilación con el que controlar la combustión de carbón, haciendo que se queme más despacio y generando solo el calor necesario para que se cocinen los alimentos, sin casi generar humo. No protestarán por el humo los vecinos ni los propios comensales. Como segunda opción del fuego y del carbón están las barbacoas eléctricas con o sin tapa. Compensa invertir más presupuesto en ellas para que los resultados del cocinado a la brasa sean buenos.