Copas, gestos y servilletas: cómo se hace un buen brindis, según los expertos
¿Cómo se hace un brindis perfecto? ¿Por dónde hay que coger la copa correctamente?
Te mostramos cómo se debe hacer un buen brindis tal y como marca el protocolo
¿Y el momento? ¿Cuál es el ideal para alzar las copas?
Las navidades ya han pasado, y con ella más de un brindis con familiares y amigos en las tropecientas cenas y comidas que has tenido a lo largo de las fechas estivales. Sin embargo, con las navidades ya pasadas nos vendrán otros tantos eventos en los que tendremos que alzar la copa y brindar. Pero ¿sabes cómo se hace un brindis correctamente? ¿Cómo tienes que coger la copa? ¿O en qué momento de la velada es mejor hacerlo?
Cómo coger la copa
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Por lo general, las copas se cogen por el tallo, por su parte más fina, como si fuese el asa de una taza. ¿Por qué desde esa zona? Porque de cogerlo por el pie o por el cáliz el vino o el champán se calentaría. Y si ves a alguien con mucha confianza que lo coge por el pie, lo más probable es que sea un catador.
No obstante, las copas de coñac y de brandy sí que se pueden coger por el cáliz, porque son bebidas que no necesariamente se deben beber frías.
¿Una servilleta?
A la hora de beber, el protocolo dice que debemos utilizar una servilleta antes y después de beber para que la copa siempre se mantenga limpia, también ser tomar un sorbo, evitando cualquier tipo de mancha. Además, algo muy importante, nada de sorber, emitir cualquier sonido se considera de mala educación.
¿Y si se cae algo?
La copa únicamente sirve para beber. Eso de montar la fiesta con ellas no está bien visto, así como que, si se cae algo dentro, no hay que intentar pescarlo, sino pedir otra nueva. Sobre esto, si hay un cambio de bebida hay que cambiar la copa, ya que cada bebida necesita una copa adecuada.
¿Puedo compartir la copa?
No, nada de compartir la copa con tu amigo, primo o hermano. Mucho menos pasar el contenido de nuestra copa a otra.
¿Cuándo es mejor brindar?
Por lo general, los brindis se hacen en el momento de los postres, cuando pega una bebida espumosa, aunque también puede hacerse con vino. El acto en sí es sencillo, se levantan las copas y, si alguien lo desea, puede dar un discurso o unas palabras. Eso sí, nada de chocar las copas ni empezar a decir eso de ‘chin chin’.