¿Te has preguntado alguna vez que lo que compras en un supermercado de España esté totalmente prohibido en otro país del mundo? Como lo oyes. Es una realidad. Evidentemente no hablamos de productos naturales, como la fruta, la verdura o la carne, sino de esos productos que contienen colorantes, conservantes, azúcar o aceites vegetales. Todos esos ingredientes que están vinculados a enfermedades cardiovasculares e incluso a algunos tipos de cáncer.
En otros casos, como en los de los huevos kínder, el motivo de la prohibición va más allá de los ingredientes. En Estados Unidos no se pueden comercializar porque los elementos incluidos en su interior, es decir, los famosos regalos, pueden contener pequeños elementos que causan asfixia. Te contamos otros alimentos que te sorprenderán.
Algo más de uno de cada cuatro españoles consume salmón al menos una vez a la semana. Este pescado azul tiene numerosos beneficios, disminuye el colesterol, ayuda a los tiroides, te ayuda a luchar frente a la osteoporosis, reduce el riesgo de infarto… Si estás acostumbrado a comprarlo en pescaderías, verás que suele haber una diferencia considerable entre el salvaje y el de piscifactoría. Pues es que este segundo, precisamente, está prohibido consumirlo en Australia y Nueva Zelanda ya que las granjas marítimas no son legales.
Es uno de los reyes de nuestras cenas de Navidad y te soluciona cualquier picoteo improvisado con amigos. Es una de las grandes estrellas de la cocina francesa, pero si ves la forma en la que se alimenta a los animales, no es de extrañar que en alguna zona esté vetado su consumo. Es lo que ocurre en California desde 2011. Además hay otros países que tienen prohibido prepararlo, entre ellos Alemania, Finlandia, Israel, Italia, Reino Unido, Turquía o Suecia.
Está cada vez más de moda y es fácil encontrarla incluso en los pasillos de supermercados tradicionales. Hablamos de fresca ya que no se le somete a ningún proceso de pasteurización previo, es decir, que no de calienta a 40 grados. De la vaca al vaso, como aquel que dice. Aunque, evidentemente, en nuestro país pasan controles de calidad antes de venderla, en otros países como Escocia está totalmente prohibida. Lo mismo ocurre en Canadá, mientras que en otras zonas europeas como Italia, Austria o Suiza tienen dispensadores a pie de calle.
Decoran los platos de esos restaurantes considerados como ‘healthy’ en los que el aguacate y el kéfir son dos de los ingredientes estrella de su carta. Aquí se pueden comprar en supermercado o herbolarios y su consumo moderado es totalmente seguro. Sin embargo, en Singapur se consideran una droga, lo mismo que en Arabia Saudita que tampoco se comercializan por motivos religiosos.