Es la prenda de la primavera, tanto en hombres como en mujeres. Y una de las más habituales en cualquier armario por su versatilidad y su vida útil. Nos referimos a la gabardina o trench, un tipo de ropa que suele durar años. El peligro de esta clase de ropa es que termina convirtiéndose en algo aburrido e, incluso, invisible. Para evitarlo, te contamos qué tener en cuenta antes de comprarlo y cómo combinarlo después para que dé mucho juego.
Asociamos las gabardinas a los tonos crudos o beige, pero hay vida más allá de los neutros. Estos tonos, como su nombre indica, tienen la ventaja de que combinan con todo o, al menos, no desentonan demasiado, pero ese es también su principal peligro: pueden hacer de un estilismo algo insípido. Roberto Sánchez, asesor de imagen y autor del libro 'Tu mejor versión' es de esta opinión: "No te quedes solo con el color beige. Hay otros tonos como el azul que sientan fenomenal y más si tu tipo de piel es frío".
Todos tenemos en la cabeza la imagen del Inspector Clouseau, el desternillante policía interpretado por Peter Sellers. Él y su sempiterna y aparatosa gabardina. El exceso de tejido no suele sentar bien y añade años. "En ocasiones solemos llevar modelos excesivamente grandes y esto puede distorsionar nuestra imagen. Prueba varias marcas, tallas y cortes, puede haber una gran diferencia entre ellos. Y no te olvides del largo, adecúalo siempre a tu altura", señala el estilista.
Si la gabardina es demasiado larga, hará parecer más bajo. Y si es demasiado corta, el efecto será el de un look raquítico.
"El tejido del trench deberá tener cierto peso para que la caída sea elegante. No es necesario que sea muy gruesopero sí cierta calidad. Lo vamos a estar utilizando durante años", explica Roberto Sánchez. La mala calidad de una tela puede arruinar un estilismo no solo porque estéticamente luzca de manera dudosa, sino porque estos tejidos suelen adaptarse mal al cuerpo. ¿Quién recuerda a Sofía Loren en 'Matrimonio a la italiana' ajustándose continuamente un vestido que muestra su mala calidad? Justo lo contrario a lo que debe ocurrir con ninguna prenda y, en especial, un trench.
Con las ideas claras de cómo debe ser la gabardina perfecta, vayamos a lo segundo más importante: maneras de combinarla para que evitar looks aburridos.
"Si tu estilo es más casual o sport no dudes ni un momento en incluir esa prenda en tu armario. La combinación trench, sudadera, pantalón vaquero y deportivas blancas es un look ganador", asegura el estilista Roberto Sánchez, quien también sugiere evitar las camisetas con gabardina. "De esta forma el look tendrá mucha más coherencia", señala.
"El trench es un clásico que hay que tener en nuestro fondo de armario, pero no dudes en combinarlo con prendas de tendencia para crear un outfit muy actual", explica Sánchez. En su opinión, el look más innovador es "un pantalón cargo, prenda en tendencia total, trench, camisa y zapato tipo mocasín. Termina el outfit con un cinturón, reloj y gafas de sol".
Tendemos a pensar en el trench como una prenda de día, pero no tiene por qué ser así. "Si quieres un look para salir por la noche cuando hace más fresco, esta combinación es perfecta: jersey fino de punto o camiseta de cuello alto, pantalón chino, zapato o deportiva blanca y listo", explica el estilista.
"Si quieres una combinación perfecta para un sábado o un domingo no dudes en ponerte tus vaqueros, el zapato que más te guste y una sudadera con capucha. Sí, algo tan simple y una mezcla que en principio puede parecerte incoherente va a funcionar a la perfección con tu trench y comprobarás cómo al momento dejarás de verlo como una prenda solo apta para looks clásicos", asegura este experto para quien la gabardina es todo menos una prenda aburrida.