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Aston Martin es una firma automovilística que nunca se conforma, siempre busca nuevos desafíos pero sin salirse de su línea, guardando su esencia en todo aquello donde pone la mirada. Que los coches es lo suyo no hay duda, si hasta se ha lanzado a diseñar garajes de lujo que no parecen lo que son. Pero su última gran hazaña es el diseño de una mansión de máximo lujo donde a más de uno le encantaría vivir o, como mínimo, pasar una noche disfrutando de todos los servicios que ofrece.
Sylvan Rock es el nombre que recibe esta mansión que se situará a las afueras de Nueva York en medio de un montón de vegetación, lo que permite estar en contacto con la naturaleza a la vez que tienes la ciudad bastante cerca. Por eso mismo esta mansión es algo así como un lugar perfecto para el retiro y unos días de desconexión total, eso sí, rodeado de lujo, nada de sencillez.
La firma automovilística británica se ha asociado con S3 Architecture para crear tal joya urbanística, una casa que tiene una parte principal y otra de invitados y que pertenece a un terreno privado de 22 hectáreas, por lo que el aislamiento está asegurado. Tanto que para llegar a la mansión habrá que recorrer un camino rodeado de bosque de unos dos kilómetros hasta que se llega a la mansión. Podría parecer el comienzo de una película de miedo, pero por suerte es de nueva construcción, así que hay pocas posibilidades de que esté encantada.
La mansión respeta el entorno y se funde con él, con una fachada creada a partir de cedro ennegrecido pero con unos inmensos ventanales que permiten ver siempre el exterior. La casa se distribuye en cuatro dormitorios, cada uno con su propio baño y dos aseos independientes. Hasta ahí todo bien, pero estando Aston Martin tras este proyecto hay que hablar del garaje, y qué garaje, pues tiene capacidad para tres coches que se separa del salón principal por un amplio cristal. Vamos, que en lugar de sentarse a ver la tele, quien se aloje aquí podrá ver desde su sofá su espectacular Aston Martin bien aparcado.
Pero más allá de ese impresionante garaje reconvertido en sala de exposiciones para los vehículos hay otras estancias que hacen de la mansión un lugar envidiable, como la espectacular piscina exterior o el spa que se encuentra en el interior para disfrutarlo si fuera hace demasiado frío. A ello se le suma una sala de juegos impresionante y una bodega subterránea que puede ser el lugar favorito de la casa para los más sibaritas. Pero para las noches más especiales, sin duda la estancia más top es la casa del árbol que no solo volverá locos a los más pequeños, también a los adultos.
Y ojo, que Aston Martin no solo ha querido fundir la mansión con el entorno, también ha querido hacerla responsable, ya que es energéticamente eficiente al contar con un sistema de ahorro de energía y también con un funcionamiento con energía solar. Aunque la iluminación con tanta cristalera no es un problema, tanto su sistema lumínico como el de sonido son totalmente personalizables para la comodidad de los huéspedes.
Comodidad más que evidente solo con ver el mobiliario de primeras calidades en esos tonos oscuros acordes con el ambiente boscoso del exterior pero también elegantes, que te harán sentir como si estuvieses en una cabaña en lugar de en una casa de lujo. Y antes te hablamos de las habitaciones, pero hay que hacer mención especial a la impresionante suite principal, que más allá de su amplitud y su baño privado tiene un vestidor espectacular y su propia sala de estar con bar. ¿Qué más se puede pedir?
Y aquí viene la gran pregunta, ¿cuánto cuesta? Pues en principio la casa se ha desarrollado para alquilarla y que la disfruten sus huéspedes al máximo, aunque la posibilidad de compra está ahí, pero no es apta para cualquier bolsillo, pues la mansión de Aston Martin ronda nada más y nada menos que los 7’7 millones de dólares. Una cifra que, desde luego, no todo mortal, ni conductor de Aston Martin, puede desembolsarse.