Los sueños tienen un poder perturbador. En el caso de los ex, aunque nuestro sueño sea un recuerdo de los buenos tiempos, tiene algo desasosegante. ¿Nostalgia por una época que no volverá o alivio por haber escapado de una historia de insatisfacción? Para los expertos, soñar con un antiguo amor responde a unas circunstancias concretas.
Cuando soñamos con algo o con alguien, nuestro subconsciente ha decidido que tiene que liberar algunas vivencias. En el caso de los ex, este recuerdo en pleno sueño puede tener distintos orígenes:
El hecho de soñar con nuestro ex ocasionalmente, de manera episódica, no es relevante. A veces el recuerdo se desencadena de manera imprevista al ver una foto o a través de alguna conversación en la que pueda surgir.
Por el contrario, si tu ex aparece frecuentemente en tus sueños, puede ser síntoma de que hay algo de insatisfacción en tu relación actual o en tu modo de vida. Esos sueños representarían el arrepentimiento, consciente o no, de la ruptura.
Soñar de manera habitual con el ex puede ser también un signo de alerta que debe hacer reflexionar sobre la vida que se ha elegido vivir, algo para lo que puedes necesitar ayuda profesional. Y la pregunta que tú o tu psicólogo debéis plantear es clara: ¿eres feliz?
Para psiquiatras y psicólogos, la importancia de los sueños es relativa. Jung, por ejemplo, minimizaba su poder, atribuyéndoles una mera llamada del pasado. En este caso, no habría voluntad de volver al pasado, sino la necesidad de continuar atados a algo conocido.
Lo cierto es soñar con un ex siempre nos deja con una sensación rara y a veces con un sentimiento de culpabilidad. ¿Cómo debemos actuar si nos sentimos así? "Un sueño no debe perturbarnos, aunque lo vivamos de manera intensa o se quede durante mucho tiempo en nuestra memoria", explica la psiquiatra Marie Carrière.
Para esta experta, los sueños no son más que "una simple proyección de nuestro inconsciente marcados por buenos o malos momentos. Los sueños protagonizados por ex parejas no siempre significan atracción, deseo o amor", asegura. En su opinión lo que sí pueden mostrar es "un periodo poco satisfactorio de la vida amorosa actual u otras razones circunstanciales. Las posibilidades son infinitas", señala.
Carrière nos da las pautas para no quedarnos enganchados a ese recuerdo en forma de sueño. "Lo mejor es no prestar demasiada atención. Y, sobre todo, no sentir la menor culpabilidad. Es un acontecimiento pasado y si le damos mucho valor corremos el riesgo de rumiarlo una y otra vez", explica. Esto último es importante porque la rumiación continua puede llevarnos a situaciones de angustia o estrés.