Cómo hacerlo mejor en el segundo matrimonio: "Valida tus emociones desde el principio"

  • En su libro 'Sintiéndome mejor, amándome mejor', la psicóloga Ana Gómez nos enseña que validar nuestras emociones puede ser la clave para transformar nuestras relaciones

  • "La rabia no tiene por qué desembocar en un sentimiento de gratitud hacia tu expareja, sino hacia la aceptación"

  • "No aceptar nuestras emociones nos lleva al malestar, a la infelicidad y podemos acabar enfermando, lo que se conoce como somatización"

Seguro que en más de una ocasión has oído cómo tu pareja te pedía que te sintieras de una manera imposible para ti. "Hay que animarse" o "No es para tanto" son frases-talismán. Aunque la intención sea buena, lo cierto es que no son buenas para nuestro bienestar emocional porque no dan por buenos nuestros sentimientos. No los validan. Ese es el punto de partida de la psicóloga Ana Gómez en su libro 'Sintiéndome mejor, amándome mejor' (Zenith). La experta nos enseña que validar nuestras emociones puede ser la clave para transformar nuestras relaciones y construir un amor seguro.

En esta guía, Gómez nos muestra la importancia de aceptar y valorar todas las emociones y sentimientos, tanto los nuestros como los de quienes nos rodean, y nos enseña una nueva forma de comunicación con nosotros mismos y con los demás que nos ayude descubrir, mediante el autorrespeto, la autocompasión, y la empatía, el lenguaje del amor seguro. Uppers ha hablado con ella.

¿Qué es validar una emoción?

Validar una emoción significa darle valor a nuestros sentimientos y emociones. Que cuando sintamos una emoción, seamos capaces de observarla y escucharla con atención, permitirnos sentirla y acompañarnos de forma amable.

¿Por qué es importante?

La validación emocional es importante tanto para la relación que uno construye consigo mismo como para las relaciones que creamos con los demás, porque implica que aceptamos como somos y quienes somos. Es decir, cuando yo valido lo que siento, entiendo que puedo sentir tristeza, rabia o miedo, y que eso no dice nada malo de mí. Al contrario, aceptar mi vulnerabilidad significa aceptar que soy humano. También es importante escuchar a mis emociones porque estas me ayudan a tomar decisiones. Si no sintiera tristeza, quizás no me daría cuenta de que el trabajo que tengo no me hace feliz. Si yo intento esquivar esta emoción, en realidad estoy pasando por alto mi malestar y no puedo vivir en coherencia con mis necesidades.

¿Qué pasa si uno mismo no acepta sus emociones?

Cuando uno mismo no acepta sus emociones lo que sucede es que vive a oscuras. Las emociones son nuestros sensores internos, las que nos indican si algo no va como nos gustaría, y nos ayudan a encauzar nuestro camino. Cuando mi estado de ánimo cambia y me estoy empezando a sentir diferente, es importante preguntarme ¿Qué siento? para identificar esa emoción y luego preguntarme ¿Cuál es el mensaje que intenta traerme esta emoción? No aceptar nuestras emociones nos lleva al malestar, a la infelicidad y podemos acabar enfermando, lo que se conoce como somatización.

¿Qué es la validación interna y la externa?

Llamo validación interna a la validación que realizamos con nosotros mismos, y validación externa a la aceptación que hacemos de las emociones de los demás, entendamos o no como se sienten. Porque para validar las emociones de los demás no es necesario comprenderles, es necesario respetar que los demás pueden sentirse como se sienten. Ambos tipos de validación son necesarios para vivir en equilibrio emocional.

Cinco frases que no hay que decir a alguien nuevo si lo que quieres es que se sienta apoyado por ti.

  • "No es para tanto".
  • "Siempre haces un mundo de todo".
  • “Pasa de todo, no sirve de nada preocuparse”.
  • "Sé más alegre".
  • "No entiendo por qué te pones así".

Cinco frases que indican que sí, que están validando a esa persona.

  • "Entiendo cómo te sientes".
  • "Llora lo que necesites, yo estaré a tu lado".
  • "Debe de ser difícil pasar por lo que estás viviendo".
  • "Puedes contar conmigo si lo necesitas".
  • "Estoy contigo, no te dejaré sola".

¿Cómo se crea de cero un vínculo sano tras un divorcio?

Es que un divorcio no tiene por qué significar que ha habido una relación tóxica. Un divorcio es el fin del pacto de amor que se habían prometido ambas personas, que puede ser porque el amor se acabó, por divergencias o malentendidos constantes en la relación o porque la balanza de lo bueno y lo malo se desequilibró terriblemente hacia lo malo. Crear un vínculo sano tras un divorcio es posible sobre todo si hacemos un trabajo de autocrítica y de responsabilidad a través de observar si cometimos errores en nuestra anterior relación y segundo, de habernos dado un tiempo para conocernos a nosotros mismos y saber qué tipo de relación y qué tipo de compañero sentimental necesito a mi lado.

¿Cómo saber si tienes una relación nueva sana o vuelves a caer en errores de la anterior?

Creo que lo más importante es que sepamos escucharnos. A veces, intentamos autoconvencernos de que la relación actual va a ser diferente cuando en realidad estamos sintiendo que vuelven a repetirse las señales que veíamos en anteriores relaciones. Por lo que siempre se recomienda ir a lo que sentimos en el cuerpo, porque el cuerpo no engaña y es la prueba más fiable que tenemos para saber si una nueva relación es sana. A grandes rasgos, también podemos fijarnos en: si la comunicación es abierta, si podemos llegar a acuerdos respetando los puntos de vista de cada uno, y esto nos ayudará a resolver los conflictos de una forma eficaz; si hay una aceptación del otro tal y como es (de su personalidad, de sus gustos y preferencias) y no una intención de convertirlo en quien yo quiero que sea; y si hay una sensación de bienestar emocional y de crecimiento personal, el otro me apoya y me impulsa a desarrollarme como persona, en vez de frenarme o limitarme en mis objetivos personales.

¿Cómo funciona la empatía entre dos personas que se están conociendo?

Pues, fíjate, como al principio, cuando conocemos a alguien lo que queremos es agradar. Entonces puede que alguien que realmente no es empático, se muestre comprensivo. Además, no es lo mismo ser empático con alguien que te cuenta un problema con un tercero, que empatizar con el otro en el momento en el que se ha generado un conflicto entre ambos. Pero no tenemos forma de saber si esa empatía o validación emocional inicial es indicativa de una capacidad de empatía real o no. Eso es algo que se acaba descubriendo a medida que se generan más interacciones con esa persona y la confianza en la relación va aumentando, de forma que se comparten más aspectos personales.

¿Cómo gestionar la rabia o elrencor con tu ex para que no te incordie a la hora de volver a enamorarte?

Gestionar de forma sana la rabia implica no alimentarla. Es decir, a veces, cuando sentimos rabia, lo que hacemos es hacerla crecer e impulsarla. En este caso, a través de revisar sus redes sociales y ver sus fotos, sus comentarios, a quién ha dado like. De esta forma lo que hacemos es avivar la llama de la rabia que tenemos dentro. Por eso es importante el famoso contacto cero. ¿Es lícito sentir rabia cuando pienso en mi ex? Totalmente. ¿Me ayuda a transitar esa rabia dándole vueltas y vueltas a nuestra relación? Está claro que no.

¿Cómo transformarlo en gratitud y seguir adelante?

La rabia no tiene por qué desembocar en un sentimiento de gratitud hacia tu expareja. Hacia donde tiene que ir transformándose es hacia la aceptación de esa ruptura. Puedes seguir adelante y construir nuevas relaciones sin agradecerle algo en concreto a tu expareja, no es algo que tenemos que imponernos. Imagina que tu pareja te ha sido infiel y le has dejado, ¿tienes que agradecerle que te hayan puesto los cuernos? No creo. Que sentimos gratitud hacia los buenos momentos compartidos y los aprendizajes que me ha traído esta relación, bien. Que no tenemos ese sentimiento, bien también.

Tres límites que marcar a tu nuevo amor para que vaya bien.

  • "Es importante que nos comuniquemos acerca de lo que necesitamos en la relación y que vayamos revisando esto cada cierto tiempo".
  • "Cada uno tiene que sentir que puede ser él mismo, sin críticas, reproches o desvalorizaciones hacia su persona".
  • "Es igual de importante el tiempo en pareja que el tiempo individual. Una relación de pareja es “te prefiero”, no “te necesito"

¿Cuándo se puede o no proyectar el futuro con la nueva pareja?

Creo que a veces es inevitable tener pensamientos de proyección hacia el futuro cuando empezamos una relación. Porque en la primera fase, el enamoramiento, se caracteriza por una necesidad intensa de estar con el otro y es muy fácil que fantaseemos con la prosperidad de la relación. A grandes rasgos, yo diría sí cuando los dos buscamos el mismo tipo de relación y cuando nuestras metas individuales coinciden. Y es mejor que no cuando encontramos divergencias en temas importantes como si tener hijos o no, por ejemplo. Y aquí es importante no dar falsas esperanzas de cambio o creer que podremos cambiar a la otra persona con el paso del tiempo.

Por último, una pregunta que hacerse de vez en cuando para saber que tanto tú como tu nueva pareja te está validando

Después de compartir algo que me inquieta, ¿puedo encontrar en mi pareja el apoyo que necesito? ¿O me hace sentir peor de lo que ya estaba? ¿Me siento escuchada y comprendida? ¿O juzgada y criticada? ¿Quiere comprender cómo me siento? ¿O sólo me da soluciones según su punto de vista? ¿Cuándo he tenido un mal día estoy deseando llegar a casa para contárselo a mi pareja?