Son cientos y cientos los universitarios que cada año cambian su universidad española por una europea gracias al programa Erasmus. Italia, Alemania, Polonia o República Checa ven como sus algunas de sus ciudades se llenan cada año de jóvenes españoles que van a pasar fuera de España un año. Hablamos siempre de jóvenes, pero ¿y los adultos? ¿Hay Erasmus también para ellos? Lo cierto es que sí. Un grupo de estudiantes ya jubilados ha preparado sus maletas para seguir aprendiendo en otro país.
Son 10 adultos de entre 63 y 72 años que estudian en la Universidad Permanente de Alicante. Han sido arquitectos o enfermeras, pero ahora, como estudiantes, se enfrentan a una semana de Erasmus para seguir enriqueciéndose. Cinco de ellos se van a Islandia con una beca de 1.300 euros en cursos de medioambiente, algo que agradecen porque, de no ser por este programa, no tendrían esta opción. Los otros cinco se van a Polonia con una beca de 800 euros con el objetivo de mejorar sus idiomas.
La experiencia será completa, compartiendo piso como esos veinteañeros que cada año ponen rumbo a un determinado país de Europa a continuar sus estudios. “Mis hijos me conocen y saben mis inquietudes, al igual que mi marido”, señala una de las mujeres a Informativos Telecinco antes de comenzar la aventura.
Lo que tienen más claro es que su objetivo es exprimir la experiencia al máximo y, si por algo son conocidos los Erasmus, es por sus famosas fiestas. “Ya somos mayores, no vamos a poder tener la juerga de los jóvenes”, comenta una de ellas, aunque una vez allí, nunca se sabe lo que depara el destino.