El pueblo español que The Sun recomienda a los británicos como una joya escondida

No hay duda de que estamos viviendo un invierno atípico en el que las lluvias están siendo escasas y estamos a unas temperaturas muy superiores de las que deberíamos tener, superando en algunas zonas de la península los 25 grados en pleno febrero. Un tiempo primaveral que tiene consecuencias, como la sequía, pero que otros muchos han aprovechado para disfrutar de los fines de semana. Y eso es a lo que invita precisamente el diario británico The Sun, que destaca una localidad española para pasar unos días de tranquilidad y sol lejos de la masificación turística.

Un pueblo tranquilo del que disfrutar

Una parte importante de los turistas que llegan a nuestro país cada año es de nacionalidad británica, que principalmente buscan días de sol y de temperaturas suaves para huir del frío del norte. Por ello, The Sun les ha hecho una recomendación para su próximo viaje a España en el que destacan una localidad gaditana que no es muy conocida por el público británico en general.

¿De qué localidad se trata? Los británicos hablan de Conil de la Frontera, un pueblo del que resaltan “sus raíces costeras” y que es muy conocida por su industria pesquera del atún, dicen las páginas que le dedicaba el diario británico. Además, también explican que de visitar Conil de la Frontera no hay que irse sin visitar la Torre de Guzmán, “uno de los monumentos más emblemáticos de la ciudad” y desde donde se puede disfrutar de unas espectaculares vistas de la costa andaluza y de las casas encaladas de la localidad.

Paseos a la orilla del mar

The Sun invita a pasear por sus calles llenas de bares y restaurantes en los que poder sentarse a degustar la exquisita gastronomía española y los platos más típicos de la zona, además de poder contemplar la estatua dedicada al escritor José Saramago que se encuentra en su plaza, donde el Nobel de Literatura lee un libro a un niño.

No obstante, y aprovechando el buen tiempo, animan a visitar sus playas para disfrutar de la arena y de las aguas del Atlántico que revitalizan a cualquiera, sobre todo en días en los que el calor aprieta y el sol (siempre con protector) y el mar son un combo perfecto.