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Cuando llegan las vacaciones de verano parece que a todos se nos viene a la mente que sí o sí hay que acudir a un destino de playa para disfrutar del mar, el sol y la arena. Pero no tiene por qué ser así. En los últimos años se ha vuelto más popular en salir de nuestras fronteras o incluso un turismo más rural o de interior. Incluso hay enclaves con aire rural muy cercanos a zonas costeras, como el que está considerado la última selva de Europa, que está aquí, en el sur de España.
Ocupando parte de la provincia de Cádiz y algo de la de Málaga se encuentra el Parque Natural Los Alcornocales, un lugar lleno de diversidad y de riqueza medioambiental por sus condiciones climáticas, pues es el único bosque subtropical del continente por sus similitudes con los bosques tropicales.
Su condición de selva es por la humedad de la zona, que ha creado áreas de laurisilva en Los Alcornocales. La laurisilva es un bosque que ocupaba gran parte de Europa y África hace miles de años y que actualmente solo queda en zonas concretas de Madeira o Canarias, como en La Gomera, por eso se conoce a esta zona como la última selva de Europa.
No obstante, los alcornoques son los árboles más populares de la zona, donde la extracción del corcho, la caza y la ganadería son los principales recursos de la zona. En cuanto a la laurisilva, esta crece especialmente en las zonas de barrancos que, debido a su profundidad, por la humedad y la sombra surge este tipo de vegetación.
Por su parte, al estar cerca del Estrecho de Gibraltar, se trata de una zona clave en la migración de aves, además de una gran presencia de ciervos o de reptiles en las partes más húmedas, mientras que donde reina la oscuridad se han llegado a contabilizar hasta once especies de murciélagos, siendo un lugar con una gran riqueza en cuanto a fauna.
Son muchos los municipios que rodean al parque, con muchos pueblos blancos en la zona, entre los que destaca Jimena de la Frontera, desde donde se puede contemplar una panorámica espectacular y única de la selva si se sube hasta su castillo.
Cómo visitarlo dependerá de las circunstancias de cada uno y del punto de partida, pero sin duda el Parque Natural de Los Alcornocales es un enclave único y espectacular para visitar en verano. Un espacio para disfrutar de la naturaleza, de un bosque del que no hay otro igual en Europa, y todo bajo la sombra y el fresco de su espectacular vegetación.