El pueblo blanco de Andalucía en plena sierra y con un castillo

Andalucía es una de esas comunidades autónomas llenas de encanto, de pueblos, de cultura, naturaleza y gastronomía. Una zona para recuerdo que nunca hay que dejar de explorar. Uno de esos pueblos imposibles de olvidar es La Iruela sin duda uno de los más bonitos del interior de la provincia de Jaén.

El municipio se sitúa a las faldas de la sierra de Cazorla y en lo alto del valle del Guadalquivir haciendo de puerta al Parque Natural de las Sierras Cazorla, Segura y Las Villas. Este entorno natural protegido, sumado al interesante patrimonio de su casco urbano, hace que haya mucho que ver en La Iruela y en sus alrededores.

“El municipio de La Iruela, como si de un puzzle se tratara, se compone de numerosos núcleos, 17 pedanías son las que lo conforman. Burunchel, El Palomar, El Burrueco, Arroyo Frío, Fontanares, La Estrella, Mortalejos, Tramaya, El Pocico, San Martín, Pasada Barrero, Los Tíscares, Arroyos de Plaza, Juntas de Muriel, Nubla, Cortijo Enroque y Cañamares”, aseguran desde la web de Jaén Paraíso Interior.

En este entorno natural protegido donde hay infinidad de ríos y cascadas como la de Linarejos, se pueden organizar rutas de senderismo y disfrutar de zonas de baño en el pantano del Tranco. Además, se pueden visitar bonitos municipios vecinos como Arroyo Frío, Cazorla y el cercano Parque Natural Sierra de Castril. La gran riqueza paisajística del Parque Natural de Cazorla, Segura y las Villas permite disfrutar de innumerables rincones llenos de vida, ideales para rutas naturales que salen del parque o desde el mismo núcleo urbano de La Iruela.

El municipio de La Iruela cuenta con un sorprendente casco histórico digno de ser recorrido. Sus calles empinadas y estrechas le dan un aspecto mágico y de cuento de hadas. Algo muy característico de esta zona es el blanco de sus casas y las fachadas decoradas con flores. En el centro de La Iruela hay una fuente y de ahí surgen varios caminos para visitar. Una de las paradas que tienes que hacer al llegar a La Iruela es en la Iglesia Parroquial de la Inmaculada Concepción.

No obstante, el lugar con más encanto de todo el pueblo es el Castillo de la Iruela, declarado Monumento Histórico en el año 1985. Se encuentra localizado en lo alto de un cerro de piedras. Un castillo construido en tres periodos diferentes, fueron los templarios medievales, los nobles del siglo XVI y los castellanos los encargados de darle vida. 

Dentro del recinto amurallado del castillo se encuentra el aljibe que proveía de agua al conjunto, y las ruinas de la Iglesia de Santo Domingo de Silos, destruida durante la Guerra de Independencia en 1810.

La Torre del Reloj originalmente formaba parte de un complejo que incluía el hospital de San Antonio Abad en el siglo XVI, cuya campana que marca las horas lo hace desde 1514 y proviene de la Iglesia de Santo Domingo de Silos.

La Ermita de San Julián, construida entre los siglos XV y XVI en honor al patrón de Burunchel, es sin duda otro de los lugares a visitar por su original cubierta de madera en el altar. 

Al ser parte del Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas, La Iruela cuenta con ríos y cascadas para visitar y disfrutar un agradable momento. La comarca se caracteriza por paisajes donde las altas cumbres se mezclan con profundos barrancos, suaves relieves y amplios valles, bosques, olivares y pastos de alta montaña, huertos, zonas húmedas, secas y áridas. La altitud asciende de oeste a este, pero no de forma continua, sino formando dientes de sierra, cuyos salientes y entrantes con progresivamente más pronunciados, alternando cursos fluviales y líneas de cumbres.

Un espacio con multitud de ecosistemas en los que se integran infinidad de especies que conforman su rica y variada fauna: desde las aves rapaces, las carroñeras, las especies cinegéticas, tanto de caza mayor como menor, los peces, anfibios, reptiles, así como la avifauna característica de la vegetación de ribera existente junto al cauce de arroyos y ríos.