Disfrutar de unas vacaciones en las Maldivas es el sueño de muchos. No es para menos. Este archipiélago ubicado en pleno Océano Índico es el destino ideal para disfrutar de playas paradisíacas de arena blanca, fondo de coral aguas cristalinas, de un clima tropical que invita a sumergirse una y otra vez en el mar y de una cultura y biodiversidad marina únicas. Con casi 1200 islas, de las que solo 200 están habitadas, las Maldivas son sinónimo de desconexión, paz y tranquilidad, un lugar de ensueño en el que descansar alejados del ajetreo y las aglomeraciones de las grandes ciudades y en el que, si tenemos dinero suficiente, incluso podremos alojarnos en una isla privada.
Imagínate pasar un verano solo, en un paraíso natural y rodeado de todo tipo de lujos. Suena bien, ¿verdad? Precisamente, esto es lo que ofrece la cadena de hoteles y resorts de lujo Waldorf Astoria Hotels & Resorts, marca del imperio hotelero Hilton, con su nueva isla privada: Ithaafushi, la joya de su oferta hotelera para la región de Asia-Pacífico.
La isla de las perlas, nombre con el que se conoce a Ithaafushi en Dhivehi, el idioma oficial de las Maldivas, es la última incorporación de Waldorf Astoria a la variada oferta de resorts de lujo del archipiélago, donde la compañía ya contaba con un exclusivo complejo hotelero inaugurado en 2019 y compuesto por más de un centenar de villas de auténtico superlujo. En concreto, se trata de una espectacular isla de aproximadamente 32.000 metros cuadrados con capacidad para albergar a 24 huéspedes y repleta de todo tipo de lujos.
Diseñada para los clientes más exigentes, tal y como apuntan desde la propia compañía, Ithaafushi, la isla privada más grande del archipiélago, ofrece todas las facilidades que uno puede imaginar para que sus clientes disfruten de una experiencia inolvidable en uno de los destinos más prestigiosos del mundo.
Este resort de superlujo está compuesto por dos villas y una residencia principal diseñadas en armonía con el entorno y con una decoración de alto nivel. La primera de estas villas tiene dos amplios dormitorios suspendidos sobre el agua y equipados con vestidores dobles, una gran sala de estar compartida, piscina, duchas interiores y exteriores y jacuzzi, entre otras comodidades. La segunda, por su parte, está rodeada de una vegetación exuberante y cuenta con tres dormitorios, dos piscinas y acceso directo a la playa. Finalmente, la residencia está dividida en cuatro dormitorios de gran tamaño con acceso directo al mar, incluye una amplia zona de estar y cuenta con jacuzzis y otro tipo de comodidades.
Además de contar con todas estas comodidades, durante su estancia en Ithaafushi los huéspedes podrán realizar todo tipo de actividades, como excursiones en yate o prácticas de buceo, y podrán recargar las pilas y relajarse en un fantástico spa sobre el agua, un gimnasio completamente equipado o en la zona para hacer yoga.
Para completar la experiencia, los afortunados que se alojen en esta maravillosa isla contarán cada uno con su propio personal de servicio y podrán disfrutar de una experiencia culinaria del más alto nivel, con un equipo de cocina disponible a todas horas y la posibilidad de viajar a otras islas para comer o cenar en sus lujosos restaurantes.
La isla de Ithaafushi se encuentra situada en las proximidades de Malé, la capital de las Maldivas. Para trasladar a los huéspedes al resort, la cadena ha habilitado seis yates de lujo capaces de recorrer la distancia que lo separa de la capital en 40 minutos, aunque, si los clientes creen que el trayecto dura demasiado, siempre pueden realizarlo a bordo de un hidroavión, que los dejará en la isla en tan solo 15 minutos.
El precio por noche para disfrutar de este resort paradisíaco es de 80.000 dólares (es decir, en torno a 65.000 euros), por lo que muy pocos afortunados podrán saber lo que se siente. Eso sí, quienes logren instalarse en Ithaafushi, seguro que querrán volver.