{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Ayer se cumplía un año desde la muerte de Verónica Forqué, la actriz de la eterna sonrisa del cine español. Su muerte entristeció a todo el mundo de la cultura y puso sobre la mesa de nuevo el debate sobre la salud mental tras haberse quitado la vida. Ella misma relató en varias ocasiones que había tenido depresión y que incluso la idea de acabar con su vida pasaba por su cabeza durante esa etapa. Quien más sufrió hace un año fue su única hija, María, fruto de su matrimonio con Manuel Iborra. ¿Cómo ha llevado la falta de su madre durante este año?
María es la persona que más sufrió la pérdida de su madre, que siempre le apoyó en su carrera como artista, donde se da a conocer como Virgen María. Ayer mismo, en el aniversario de su muerte, la joven recordaba a la actriz subiendo una foto de ella a sus redes sociales, con quien mantenía una relación de plena confianza y admiración.
Durante este año, María ha podido seguir trabajando, labrándose una carrera en el arte performático llegando a realizar exhibiciones en diferentes países de Europa o en Estados Unidos, combinando este trabajo con su cuenta en la red de contenido exclusivo para suscriptores, Only Fans.
Su faceta creativa, con sus performances o como DJ, ha sido clave para forjar una imagen única y extravagante, también algo perversa, que explotar en sus espectáculos. En estos últimos ha trabajado en España, pero sobre todo fuera, en París, Alemania, Nueva York, Miami, California, o México, donde Virgen María se convirtió en cabeza de cartel del festival Goteo en Ciudad de México.
En el terreno emocional, sigue muy ligada a su madre. “Cuando necesito un abrazo se lo pido. Tú puedes hacerlo también. El ser humano es muy limitado y tiende a creer solo en lo que ve, pero no solo se ve con los ojos”, decía en una carta que publicó en la revista Shangay. Hace solo unos días Forqué habría cumplido 67 años y María expresó en redes que seguramente este día la pillaba “bailando muy feliz en algún lugar por ahí”.
Además, según publicaba hace poco El Español, María Forqué habría cumplido la última voluntad de su madre al vender el piso donde falleció la actriz, en el barrio de Chamartín. Los planes de la ganadora de cuatro premios Goya pasaban por vender ese piso y mudarse a Cartagena, donde quería jubilarse.