El Congreso de los Diputados ha aprobado la ley de Bienestar Animal tras meses de debate para su tramitación, que aún tendrá que seguir su camino en el Senado, donde puede sufrir diferentes modificaciones. Son muchos los cambios que trae consigo la nueva norma, entre ellas las condiciones de cuidado de los animales, así como un nuevo listado en el que se exponen qué mascotas sí pueden tenerse en casa o lo conocido como sacrificio cero, pudiéndose practicar en situaciones concretas.
“En condiciones de vida dignas”, así es como define la ley que deben mantenerse las mascotas. Por eso mismo, se fija en un reglamento las características en las que deben vivir las especies que se encuentren dentro de jaulas, terrarios o acuarios, entre otros, como puede ser el tamaño de ese habitáculo.
Mientras tanto, los animales que vivan en el exterior de la casa deberán tener unas instalaciones reguladas en las que resguardarse y tener acceso a la comida y la bebida. No solo eso, tampoco puede dejarse a ningún animal de compañía sin supervisión más de tres días consecutivos, aunque si hablamos de los perros el tiempo no puede superior a las 24 horas.
Otro de los datos para tener en cuenta es que se implanta un curso de tenencia responsable de perros. Es decir, aquellas personas que vayan a ser titulares de un can tendrán que acreditar que han hecho un curso de formación, que es gratuito, y un test junto al perro para valorar sus aptitudes en las que desenvolverse socialmente.
Por su parte, criar perros estará limitado a aquellas personas inscritas y certificadas como criadores profesionales, de no ser así, las sanciones irán de 500 a 10.000 euros. Por tanto, los dueños de perros que no tengan tal certificado tendrán que adoptar medidas como la esterilización, para evitar la reproducción incontrolada. En los gatos sí será obligatoria la esterilización a partir de los seis meses. Donde no entran estas normas es en los perros de caza o pastoreo.
La norma también busca el sacrificio cero en las mascotas, pudiéndose practicar la eutanasia en situaciones específicas, un punto que muchos veterinarios no comparten, ya que creen que imposibilita, tanto al propietario como al veterinario, darle una muerte digna al animal cuando, a pesar de haber tratamientos, por diferentes motivos, como el económico, no se puede acceder a estos.
Por último, otro de los puntos clave es la prohibición de venta y exposición de animales en las tiendas, además de crear unos listados con las mascotas que se podrán tener, o no, en casa, listados que aún no están desarrollados.