Hace más de dos décadas, Luis Figo, emblema del fútbol de nuestro país que se retiró de la disciplina en 2009, pasaba por el altar junto a Helene Svedin. De la unión entre el deportista y la modelo llegaron al mundo sus tres hijas, Daniela, Martina y Stella, que aunque siempre se han mantenido en un plano discreto a pesar de la gran popularidad de su padre, han seguido los pasos de su madre en lo profesional.
La mayor de las hijas de la pareja, Daniela, es una apasionada de la moda y en las redes sociales acumula miles de seguidores, sin embargo, ha dirigido sus estudios hacia la biomedicina, carrera que ha estudiado en la Universidad de Navarra.
En cuanto la pequeña de las tres, Stella, es la más parecida físicamente a su progenitor y la única de las hermanas con el pelo castaño. En lo profesional, ha dado sus primeros pasos como modelo.
La mediana, Martina, actualmente vive entre Madrid y Londres, ciudades en las que trabaja en la moda, sector en el que comenzó cuando tenía 16 años, y al mismo tiempo, intentando hacerse un hueco en el mundo de las farmacéuticas, grado en el que se ha formado. Además, trabaja con la firma de joyas ‘Rabat’ y aunque también acumula centenares de ‘me gusta’ en su perfil público, opina que “tiene nombre propio” y nunca “le han pesado” las etiquetas de ‘hija de’, tal y como ha confirmado a ‘La Vanguardia’.
Ha sido al citado medio a quien Martina ha concedido una entrevista en la que se ha sincerado sobre cómo desarrolla su plano profesional y los blancos y negros de pertenecer a una familia reconocida. Sobre la etiqueta de ser ‘hija de’, ha insistido en que “nunca le ha pesado”: “Son mis padres, les quiero y admiro por todo lo que han conseguido. Pero también tengo nombre propio. Es como si vas a una cena y te presenta como “la novia de”… pues prefieres que no te llamen así. Pero nunca ha sido un problema real para mí. De hecho, si lo intento ver como algo positivo y bonito, que me relacionen con dos personas que valoro tanto: pues sí, ‘soy hija de’ y no pasa nada”, ha admitido.
También en el mismo lugar, la que se define como “muy perfeccionista, especialmente en el trabajo” ha explicado los consejos que ha recibido por parte de su madre de cara a desarrollarse en el modelaje: “Algo que se me ha quedado muy clavado de ella, y que se lo digo a todo el mundo, es la frase de cuidar a la gente como te gustaría que te cuiden a ti. El ser amable con las personas, porque todo el mundo merece ser tratado por igual”, ha sentenciado.