Mandar a tus hijos a un campamento de verano este año o no hacerlo. Es una de las cuestiones más recurrentes que sobrevuelan las cabezas de los padres en las últimas semanas. Ellos quieren y a ti, en parte, te da miedo o, al menos, mucho respeto. Según los datos del Colectivo Nacional de Campamentos, solo la mitad han abierto sus puertas. Unos dos millones de niños disfrutarán, no obstante, de este tipo de actividades recreativas, eso sí, con mascarilla, distanciamiento y grupos reducidos. Esta es la primera semana para algunos de ellos y ya se han dado los primeros positivos en coronavirus dentro de ellos. Dos monitoras en Tárrega y Albesa, localidades de Lleida fuera de la zona confinada, parecen padecer el virus y el segundo ya ha cerrado sus puertas. Te explicamos qué dicen las comunidades y los campamentos sobre la actuación ante posibles positivos dentro de sus instalaciones.
Tras la finalización del estado de alarma y la devolución de las competencias a las comunidades, son estas las encargadas de elaborar los protocolos que determinen cómo deben ser los campamentos de verano y cuál es el procedimiento a seguir en caso de que haya rebrotes de coronavirus dentro de ellos.
El Colectivo Nacional de Campamentos de Verano, una institución que aúna a gran parte del sector, presentó a finales del mes de junio un borrador de protocolo "para para evitar 17 modelos de campamento diferentes". En él, se recomienda que ante la aparición de síntomas el participante debe interrumpir la actividad y que sus familiares disponen de 12 horas para recogerle tras la comunicación. Si se trata de un caso confirmado, "se notificará a las familias y a las autoridades y se coordinará el regreso de los participantes a sus domicilios, derivándolos a sus sistemas sanitarios de referencia para las actuaciones sanitarias que resulten pertinentes".
En el caso de la Generalitat, única comunidad en la que se ha dado algún caso por el momento, Georgina Oliva, secretaria de Atención a la Infancia, Adolescencia y Juventud explicó al presentar el protocolo que se garantizará "la distancia de dos metros entre personas, reduciendo las ratios a grupos de diez niños con dos monitores. Además, siempre serán los mismos niños con los monitores, no habrá interacción con otros grupos para evitar contagios", y en el caso de que alguien ya sea, niño o monitor, presente síntomas se les podrá "aislar de forma contundente sin alterar el resto de las actividades de otros grupos". A todo esto hay que sumar unas medidas de higiene personal y de las instalaciones exhaustivas, circuitos específicos de entrada y salida para evitar aglomeraciones y espacios alternativos para garantizar una ratio de cuatro metros cuadrados por niño.
Pese a la existencia de estos protocolos, son pocas las comunidades que reflejan qué hacer en caso de que aparezcan positivos en covid-19 entre niños o monitores. La experiencia nos dice que el confinamiento y aislamiento es fundamental, lo que queda averiguar es dónde se realizará el mismo, si dentro de las instalaciones o en el domicilio habitual. Estas son las comunidades que sí reflejan unas pautas a seguir:
Una portavoz de Campamentos.info (que trabaja con más de 200 instalaciones en toda España) nos cuenta que, aunque desde el Colectivo de Campamentos, al que pertenecen, han elaborado ese borrador de protocolo, no hay una directriz oficial común a toda España. En caso de síntomas, la recomendación de ese 'borrador' es siempre ponerlo en conocimiento de las autoridades sanitarias de la zona y también informar a los familiares y resto de usuarios. "Nos costó mucho tener una normativa para las comunidades autónomas. Tenemos claro cómo recepcionar a los niños, pero está siendo más complicado cuando se produce un positivo porque no hay pautas. Algunos campamentos han pedido test antes de entrar y si hay positivo se devuelve el dinero, pero el niño no entra en el campamento", señalan desde Campamentos.info.
Desde la plataforma también entienden que si se produce un positivo es razonable pensar en que pueda darse un confinamiento. "Creemos que no va a ser posible que un niño salga del campamento si se produce un positivo". Sobre la posibilidad de que un padre quiera recoger a su hijo de un campamento confinado, desde Campamentos.info recuerdan que cuando un padre deja a su hijo cede temporalmente la guarda custodia. "Una vez el niño entra en nuestros campamentos la guarda custodia la tenemos nosotros y nos tenemos que someter a lo que nos marque la autoridad sanitaria".
Además, en el sector hay muchas dudas sobre quién asume los costes adicionales de una posible cuarentena que alargue el tiempo del campamento más días de los previstos. Eso sí, desde Campamentos.info reconocen que en ningún caso debería asumirlo la familia del niño usuario del campamento. Por un lado, las ayudas públicas y por otro los seguros de responsabilidad civil (algunos sí cubren casos de COVID) deberían hacer frente a esos costes, aunque también temen que si finalmente se produce esta situación el coste seguramente lo tendrá que adelantar la empresa y luego pelear por recuperarlo.
Por su parte, desde el Instituto de Juventud (Injuve), reconocen que "existe mucha confusión en este aspecto". En uno de sus borradores explican que, en caso de que existan síntomas, el protocolo sería hablar con las autoridades sanitarias competentes, que sean ellas las que confirmen las sospechas y establezcan las pautas a seguir. "No podemos hacer otra cosa que quedarnos en sus manos, que acatar sus decisiones", aseguran.
Cuando les preguntamos sobre un posible confinamiento, desde Injuve, y a diferencia de Campamentos.info, ven prácticamente inviable que sea el campamento es que se haga cargo de ello. "En el caso de que los niños diesen positivo en el campamento, parece lógico que en el campamento no se van a quedar. Dejarían de estar en manos del campamento para estarlo en la de las autoridades sanitarias.