El puente de Londres no se ha caído, pero casi. El duque de Edimburgo, nacido como Felipe de Grecia y Dinamarca, ha fallecido a los 99 años "pacíficamente" en su residencia en Windsor y tras un mes de ingreso hospitalario en un delicado estado de salud. Así lo ha comunicado el Palacio de Buckingham: "Es con profundo pesar que Su Majestad la Reina ha anunciado la muerte de su amado esposo, Su Alteza Real el Príncipe Felipe, Duque de Edimburgo". El príncipe consorte, casado con Isabel II desde 1941, siempre ha mantenido un papel en segundo plano tras la Reina. Pero sus comentarios poco diplomáticos lo han convertido en uno de los personajes de la monarquía europa más controvertidos.
Su salidas de tono son tan conocidas que, cuando el pasado mes el príncipe Harry y Meghan Markle desvelaron en una entrevista exclusiva con Oprah Winfrey que alguien dentro de la Casa Real, en los albores de su relación, había preguntado qué color de piel tendría un posible hijo de la pareja, ambos corrieron a desmentir que se trata del Duque o de la Reina, a sabiendas de que periódicos y revistas señalaría a Philip.
"Damas y caballeros, se presenta ante ustedes la persona con más experiencia en el mundo en descubrir placas conmemorativas", decía en sus apariciones públicas, de las que se jubilaría definitivamente en 2017. Recopilamos aquí algunos de sus comentarios más espinosos.
Esta frase la pronunció en su visita a República Dominicana en 1966 durante un viaje de Estado. La soltó a sus anfitriones en mitad de un acto oficial.
Con esta salida de tono dirigió su atención a una mujer mayor que, en su silla de ruedas, se cubría del frío con un aislante térmico parecido al aluminio durante otro acto en una residencia de mayores.
Se lo dijo a un hombre minusválido que iba en silla de ruedas en 2012.
Se lo dijo al presidente de Nigeria, vestido con túnica, en 2003.
Con estas palabras se dirigió a a lord Taylor de Warwick haciendo referencia a su color de piel y sin saber de quién se trataba en un encuentro organizado por la Commonwealth. A lo que él le respondió: "Soy de Birmingham (Inglaterra)".
En un encuentro con Barack Obama, el expresidente estadounidense le dijo que ese mismo día se había entrevistado con el entonces primer ministro Gordon Brown con Dmitri Medvédev y David Cameron. Esa fue su respuesta.
Con estas palabras habló sobre una joven asistente que vestía un vestido con cierre delantero en una visita en Londres.
En 1967, al ser preguntado por si le gustaría visitar la Unión Soviética, contestó con esa frase lapidaria.