Un mes de septiembre nunca había sido tan controvertido y menos un comienzo de curso académico. Colegios, guardería e institutos se preparan para una gradual vuelta a la 'normalidad' siguiendo los protocolos, lo mismo hacen las universidades, ahora que ya conocen el protocolo a seguir. Lo ha fijado la Conferencia General de Política Universitaria, un órgano compuesto por los responsables de enseñanza universitaria de las diferentes comunidades autónomas y presidido por el secretario general de Universidades, José Manuel Pingarrón, en sustitución del ministro de Universidades, Manuel Castells, recientemente intervenido quirúrgicamente. Como padre, estarás preocupado por saber si tu hijo irá o no a clase o en qué condiciones lo hará, sobre todo si se trata de su primer o último año de carrera. Te contamos en qué consiste el protocolo y qué otras medidas están incluyendo algunas universidades de cara al nuevo curso.
Además de estas directrices elaboradas por la Conferencia General de Política Universitaria, cada universidad tiene elaborado su propio protocolo que incluye desde clases presenciales voluntarias para evitar que alumnos de otras ciudades se tengas que desplazar hasta la obligatoriedad de hacerse una prueba PCR antes de comenzar el curso. Hablamos con varias universidades para que nos expliquen las medidas establecidas.
Desde la Universidad Pontifica de Comillas, nos cuentan que, además de las medidas reglamentarias se ha reducido el número de alumnos por aula. "Ponemos en marcha un plan de bimodalidad simultánea o síncrona: no se trata solo de combinar presencialidad física y virtual, sino que además todos los alumnos están interconectados simultáneamente esto permite, por un lado, que se cumplan las medidas de seguridad y por otro lograr una experiencia docente prácticamente idéntica a la presencial física para los alumnos que están en remoto".
Una propuesta similar nos cuenta Ángel Bartolomé, Vicerrector de Estudiantes y Vida Universitaria de la Universidad CEU San Pablo, quien asegura que, durante este curso, apuestan por un modelo de doble presencialidad. Los alumnos podrán asistir a la facultad o, aquellos que lo prefieran o necesiten, acceder a las clases en tiempo real a través de videoconferencia, gracias a la tecnología Hyflex con la que verán tanto al profesor como a sus compañeros y podrán interactuar con ellos. "Así aseguramos que todos los alumnos tengan acceso a su educación sea cual sea su situación, estén sanos, vivan con personas de riesgo, tengan coronavirus o incluso si ordenasen otro confinamiento generalizado".
Además, antes de empezar las clases, ofrecerán a los alumnos una semana en la que les explicarán los protocolos, los flujos de entrada y salida en función del horario (tendrán que acudir al menos 20 minutos antes del comienzo de la clase), también habrá un gabinete psicológico trabajando con los estudiantes que lo requieran, "queremos que vean que el CEU es un espacio seguro, que pierdan el miedo", asegura Bartolomé. Otra de las novedades se da en la cafetería, en la que, además de reducir el aforo, se pondrá todo en formato 'take away' para que se pueda consumir al aire libre en mesas habilitadas que se limpiaran de forma continua, "hemos multiplicado por tres el personal de limpieza", apunta.
Geles hidroalcohólicos, zona de desinfección de zapatos, o una 'Platafoma Covid', en la que encontrar toda la información sobre los protocolos, son otras de las medidas aportadas, aunque desde el vicerrectorado aseguran que "hacemos una llamada al compromiso y responsabilidad de los alumnos, son adultos y saben la gravedad de la situación".
En la Universidad Nebrija, la única que ha recibido hasta el momento el triple sello Garantía Madrid por sus medidas anticovid, María Gil, la Directora de Comunicación, nos explica que ellos también optan por un modelo de presencialidad híbrida, en el que "la gente que lo desee podrá venir a clase, manteniendo unas medidas estrictas y, de forma extraordinaria, también les hemos ofrecemos que los grados presenciales se cursen de manera remota para facilitar las cosas sobre todo para alumnos internacionales o gente que viene de fuera de Madrid".
Aquellos estudiantes que decidan acudir al campus deberán acceder a través de una zona de desinfección de pies y de medición de temperatura, instalados para detectar de inmediato posibles casos de covid-19. Además, deberán desplazarse siguiendo el sentido de los flujos designados y solo podrán comer y beber en las zonas habilitadas, manteniendo siempre la distancia de seguridad.
Especial atención prestan también a uno de los servicios más empleados en la universidad, el de biblioteca. Quedan suspendidas las actividades de estudio en sala, las actividades culturales y los préstamos interbibliotecarios aunque sí se podrá buscar información bibliográfica y la retirada y devolución de obras a través de una persona encargada que dejará los libros en cuarentena durante al menos 14 días.
En cuanto a la realización de pruebas PCR a sus alumnos, "es una medida que se está estudiando, pero que todavía no se ha decidido implantar", asegura Gil. La universidad que sí va a realizar test serológicos a sus alumnos, entre siete y cuatro días antes de su llegada al campus, es el Instituto de Empresa. Ofrece a los estudiantes varios laboratorios a los que acudir, tanto dentro como fuera de nuestras fronteras, dado el elevado número de estudiantes internacionales que recibe. Si estos vienen de Estados Unidos, deberán llegar al menos con 15 días de antelación y manteniendo una cuarentena recomendada.
Precisamente con dos semanas de antelación deberán darse de alta todos los alumnos en la aplicación ‘Covid 19 Tracer Web’ en la que encontrarán los resultados de sus pruebas serológicos y en la que, diariamente, deberán completar un cuestionario sanitario antes de entrar al campus. Una vez allí, disponen de cámaras térmicas para controlar la temperatura de los alumnos, flujos de desplazamientos para evitar aglomeraciones, se ha reducido la capacidad de las clases y se han impuesto medidas de seguridad e higienizantes como la presencia de gel hidroalcohólico en todas las instalaciones.
Fuera de nuestras fronteras el modelo semipresencial también va ganando adeptos. En Italia el modelo mixto, se combinará, por lo menos, durante el primer semestre. El ministro de Universidades, Gateano Manfredi, asegura que se volverá de forma presencia a las aulas pero que la integración de la enseñanza a distancia es fundamental para no abarrotar las aulas. En Francia, el presidente de La Soborna propone lo mismo, un modelo de enseñanza híbrido.
Mientras tanto, en una de las universidades más prestigiosas del mundo, la de Cambridge, en Reino Unido, las clases inicialmente iban a ser online durante todo el curso académico pero para aquellas que requieren presencialidad, por la naturaleza de la actividad, han desarrollado un extenso protocolo que incluye la obligatoriedad de mascarillas, el distanciamiento social y el ofrecimiento de test a aquellos estudiantes y personal docente que lo requiera.