Según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), solo en vías interurbanas fallecieron 870 personas en 2020, de los cuales 125 no llevaban puesto el cinturón de seguridad, es decir, el 26%, mientras que de las 2.797 personas que fueron hospitalizadas por un accidente, el 15% no lo tenía puesto. Como la misma entidad dice, el cinturón de seguridad nos amarra a la vida, pudiéndola salvar en muchos accidentes, por eso la DGT ha dedicado una semana entera a realizar una campaña para animar y recordar que el uso del cinturón es obligatorio, especialmente para los reincidentes.
Y la DGT se fija en los reincidentes, esos que han sido multados en dos o más ocasiones por no utilizar el cinturón de seguridad, que en 2020 ascendieron a 2.883 personas, una cifra que puede no parecer no muy abultada, pero teniendo en cuenta la limitación a la movilidad que hubo durante el año pasado, la cifra es similar a la de años anteriores (3.144 en 2019 o 2.628 en 2018), lo que preocupa a la DGT.
Para entender por qué algunos conductores siguen sin ponérselo, a pesar de haber sido denunciados por no llevar el cinturón, Tráfico ha querido contar con el consejo psicológico en esta campaña para conocer qué les lleva a no abrochárselo. "Falta de conciencia sobre la vulnerabilidad y fragilidad ante un accidente" es uno de los factores que lleva a no abrocharse el cinturón, junto a la imposibilidad de ser sancionados que ven en ciertas vías, como las urbanas, además de normalizar ese incumplimiento, apunta la psicóloga Asunción Tárrago a la DGT.
Tráfico también ha recordado que el cinturón no solo salva vidas, también te permite conservar tu carnet de conducir y te evita una multa económica, ya que tal y como apunta, no usar, o no hacerlo correctamente, tanto el cinturón, el casco en caso de ir en moto, o la silla para los niños, conlleva una sanción de 200 euros y cuando se reforme la ley de Seguridad Vial no se retirarán 3 puntos de carnet, sino 4.
No llevar el cinturón puede hacer que en caso de accidente una persona choque contra superficies duras, como el asiento de delante o el salpicadero y, lo que es peor, convertirte en lo que la DGT llama un pasajero bala, ese que puede salir despedido y chocar contra el resto de ocupantes del vehículo. Por eso, Tráfico muestra cifras, llevar el cinturón reduce hasta un 50% el riesgo de lesiones mortales en los ocupantes de asientos delanteros y en un 75% el de los pasajeros traseros.
A pesar de que según la DGT hay una sola razón para hacer uso del cinto, salvar vidas, ha reunido 10 puntos para convencer a todos los conductores y pasajeros, especialmente los reincidentes, para que se lo pongan siempre antes de arrancar el motor del coche.