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Puede que sea la situación que más enerva cuando vas conduciendo por una autopista o autovía de varios carriles en el mismo sentido de la marcha. El código de la circulación es bien claro: “Siempre hay que circular por el carril más a la derecha que nos sea posible”. Pues bien, no hay día que salga por la A6 dirección Coruña y, con 4 carriles a nuestra disposición y apenas unos pocos coches circulando en este sentido, siempre te encuentras a un buen puñado de indocumentados que van por el tercer carril empezando por la derecha y a 100 km/h cuando el máximo permitido es 120.
En lo que llevamos de año sólo una vez he visto a dos guardias civiles en moto hacer señas a los coches para que se desplazasen al carril derecho, nada de parar y sancionar. En cualquier caso, ya es un avance respecto a los años que hemos visto esta práctica a diario, con el riesgo que ello conlleva: retenciones, frenazos, colisiones… un hábito para muchos que está prohibido según el artículo 82 del Reglamento General de Circulación y que nos puede costar una sanción económica e, incluso, la retirada de puntos.
El desconocimiento de la norma no justifica su incumplimiento. Este precepto es básico en las leyes de los estados de derecho. Y en este caso, la cosa está clara: “Los vehículos deben circular por el carril más a la derecha. Los carriles central e izquierdo se han de utilizar, única y exclusivamente, para adelantar. Una vez que el adelantamiento esté hecho, el vehículo deberá regresar al vial derecho”.
Leyendo esto no hay lugar a dudas, pero a pesar de ello, esta práctica se repite una y otra vez en cualquier vía en la que existan varios carriles. La cosa empeora si sólo hay dos carriles para el mismo sentido, pues no es extraño ver, con el carril derecho libre, el izquierdo abarrotado y por debajo de la velocidad máxima permitida.
La Dirección General de Tráfico (DGT) ha llegado a publicar diversos vídeos en los que se ve cómo los conductores ocupan el carril izquierdo y provocan absurdas situaciones de riesgo totalmente evitables. Los protagonistas de estas acciones se enfrentan ahora a sanciones de 200 euros y, ojo al dato, la detracción de 4 puntos del carnet de conducir.
Esta actitud censurable entorpece el flujo del tráfico, provoca atascos perfectamente evitables y acaba por desesperar a los conductores que desean ir más rápido dentro de lo permitido y, por ello, a veces desencadena otras acciones igual de evitables y censurables como es el hecho de adelantar por carriles de la derecha, con el consecuente peligro que ello conlleva, además de la correspondiente multa.
Según los últimos datos de Tráfico, el porcentaje de uso del carril derecho en vías rápidas apenas pasa del 50% cuando son de doble carril. La seguridad se ve comprometida siempre que no se cumple con este precepto. Un ejemplo claro: Hay poco tráfico en una autovía de cuatro carriles. Un conductor despistado, sin nadie a la vista, en vez de ir por el carril más a su derecha va por el tercero, es decir, sólo tiene un carril a su izquierda y dos a su derecha. Nosotros vamos a 120 km/h por el carril de la derecha y, para que no nos sancionen, debemos adelantar por la izquierda de este vehículo, cruzando todos los carriles hasta el más a la izquierda y volviendo de nuevo a cruzar todos ellos hasta volver al carril más a la derecha. La situación que provoca el incívico y despistado conductor que va por el tercer carril es muy peligrosa y, a partir de ahora, “multable”, tanto a nivel económico como a nivel de puntos en el carnet de conducir.
Supuestos en los que está permitido adelantar por la derecha
Recordemos que existen casos en los que se puede adelantar por la derecha: el principal es en una situación de atasco, donde los carriles avanzan unos más rápidos que otros sin responder a una ordenación determinada.
Además del caso mencionado, también está permitido cuando el coche de delante indica un giro a la izquierda o circulando dentro de los poblados.