Cómo limpiar los cristales del coche: ocho remedios caseros muy efectivos

  • Vinagre blanco, alcohol, bicarbonato, jabón líquido, lavavajillas, refresco... Las opciones para limpiar el parabrisas son muchas

  • Mantener los cristales del coche limpios no solo mejora la visibilidad durante la conducción, sino que también contribuye al mantenimiento general del vehículo, alargando su vida útil

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Mantener los cristales del coche limpios es importante no solo para la estética del vehículo, sino también para garantizar una visibilidad óptima y, por lo tanto también para la seguridad al conducir. La acumulación de suciedad, polvo, y residuos puede llegar a obstaculizar significativamente la visión, lo que representa un riesgo para el conductor y los pasajeros. 

En este contexto, existen distintos remedios caseros que podemos aplicar para llevar  la limpieza de los cristales de nuestro coche a un nuevo nivel… Amén de también ser una opción eficiente, económica y accesible, que permite a los propietarios de vehículos cuidar de sus automóviles sin necesidad de recurrir a productos químicos costosos o servicios profesionales. 

Para limpiar los cristales del coche y asegurar una visibilidad óptima, es importante seguir algunos consejos y utilizar remedios caseros efectivos. A continuación, os presentamos varias estrategias y soluciones de limpieza que podemos preparar fácilmente en casa.

Métodos caseros para limpiar los cristales del coche

Lo primero que debemos hacer es quitar el polvo y residuos sueltos en la superficie del cristal. Podemos hacerlo con una toalla de microfibra o un paño seco. Tras esto habría que aplicar alguna de las soluciones que os proponemos a continuación, para después secarlo con movimientos circulares.

  • Vinagre blanco: Mezcla vinagre blanco con agua en partes iguales y aplica con un pulverizador sobre los cristales, luego limpia con un paño seco.
  • Alcohol isopropílico: Combina alcohol isopropílico con agua y utiliza la solución para limpiar los cristales con un paño.
  • Bicarbonato de sodio: Disuelve bicarbonato de sodio en agua caliente y usa un paño humedecido en esta solución para frotar los cristales.
  • Jabón líquido para platos: Para limpiar los cristales, una mezcla de jabón líquido para platos en agua caliente puede ser efectiva. Aplica la espuma generada directamente sobre los cristales y luego seca con un paño limpio.
  • Lavavajillas: En caso de no disponer de los productos anteriores, el detergente de lavavajillas también puede ser efectivo, aplicándolo con una esponja o bayeta sintética.
  • Refresco de cola: Sorprendentemente, el refresco de cola puede servir como un excelente limpiador para los cristales del coche. Su aplicación puede ayudar a eliminar manchas difíciles y restos de agua resecos, además de actuar sobre el óxido en las partes bajas de la carrocería.
  • Amoniaco: Aunque es muy eficaz para la limpieza de los cristales, se debe utilizar con cautela debido a sus componentes tóxicos.
  • Papel de periódico humedecido: Para la limpieza interior de los cristales bastaría con humedecer papel de periódico en agua con jabón y limpiar los cristales con movimientos de arriba a abajo.

Consejos para limpiar los cristales sin peligro

Para la limpieza de los cristales, es esencial elegir productos que no dañen su superficie. Se recomienda evitar el uso de productos abrasivos y optar por soluciones específicas para cristales de automóviles. Además, hay que tener en cuenta que los cambios repentinos de temperatura pueden causar daños en los cristales, como grietas. Por tanto, se aconseja no limpiar los cristales con agua caliente en días fríos ni exponer el coche directamente al sol. Otro aspecto importante es prestar atención a las escobillas limpiaparabrisas, ya que si están desgastadas pueden dañar los cristales del coche.

Es importante tener presente que mantener los cristales del coche limpios no solo mejora la visibilidad durante la conducción, sino que también contribuye al mantenimiento general del vehículo, alargando su vida útil, por lo que conviene añadir este tipo de rutinas de limpieza al mantenimiento habitual de nuestro vehículo.