Para ir en moto son necesarios varios accesorios para ir con toda la seguridad posible en caso de cualquier accidente. El casco es obligatorio, no se puede salir a la carretera y ni siquiera arrancar el motor si no te lo has puesto, convirtiéndose en el principal accesorio de seguridad de la moto. Luego hay otros tantos, como el uso de ropa larga que cubra todo el cuerpo, aunque sea verano, guantes, o una chaqueta especial. Pero seguro que en más de una ocasión has visto a algún motorista con un traje específico, un mono que parece propio de cualquier piloto de competición pero que es aconsejable para cualquier conductor de moto. Ahora bien, ¿sabes cómo elegir el adecuado?
Para empezar hay una primera decisión: un mono completo o uno de dos piezas que, aunque tienen una misma función, por sus características ambos están más destinados a un tipo de conducción que a otro. Los completos son los ideales para las competiciones, lo vemos en los pilotos, pero también lo son para los viajes más largos en los que la velocidad es mayor a la que se alcanza en carreteras urbanas o secundarias. Por su parte, el traje de dos piezas, al ser más adaptable y combinable es ideal para su uso en ciudad, trayectos más cortos en los que es posible usar solo una de las partes.
Antes de ir a por tu mono no está de más tomar unas medidas de tu cuerpo para ir con una idea de tu talla. Aún así, será en la tienda donde verdaderamente sepas si el mono es para ti o no, para lo que es totalmente necesario que te lo pruebes. Puede que te quede perfecto, como si estuviese hecho a medida para tu cuerpo, pero antes de pasar la tarjeta y llevártelo haz algunas pruebas. Toma la posición que llevas cuando estás en la moto o los movimientos que haces al subir y bajar para asegurarte de que te permite una movilidad óptima. Además, se aconseja llevar tus guantes y botas para que pruebes la comodidad y confirmes que todo tu cuerpo queda cubierto.
Por supuesto, cualquier material no vale. Entre ellos está el nailon, aunque lo más frecuente es encontrarlos de cuero procedente de piel vacuna o de canguro. La de vacuno es ideal para el invierno porque es una gran protectora contra el frío de la época, cosa que la de canguro, al ser más fina, no abriga tanto en los meses más gélidos, aunque se adapta mucho mejor al cuerpo y a la postura que se toma al conducir. También están los de kevlar, que se utilizan en competición y que han comenzado a coger fuerza también en la carretera.
Si estás dispuesto a hacerte con un mono y eliges bien puede que no necesites protección en los codos o en las rodillas porque el traje ya los trae incorporados, no solo en esas zonas delicadas de las articulaciones, también hay monos que traen protecciones para el pecho o la espalda que los hacen mucho más seguros frente a cualquier accidente. Para más seguridad todavía, hay algunos trajes que cuentan con el airbag incorporado, muy similar al que tienen los trajes de competición.
Entre el resto de las características que hay que tener en cuenta para la elección del traje perfecto para montar en moto está la perforación, la cual conlleva a una ventilación adecuada para el confort del conductor en cualquier momento del año. Por otro lado, un mono no es precisamente lo más barato del mercado de las dos ruedas, por lo que contar con productos de limpieza adecuados es lo ideal para evitar dañarlo y mantenerlo en condiciones para salir siempre que te apetezca a la carretera.