Cada uno tiene su forma de viajar, pero una de las formas más espectaculares es hacerlo en moto. La sensación de libertad y de adrenalina que recorre el cuerpo cada vez que te subes a la moto es indescriptible. Si eres motero seguro conoces muchas o estás deseando tener la oportunidad de viajar para descubrir algunas de las que te quedan por visitar. El mundo está lleno de rutas de motos, y si eres de los que está esperando a jubilarse para recorrerlas todas sin ninguna prisa ni preocupación, aquí te traemos cinco a las que seguro que ya les has echado el ojo, aunque a lo mejor hay alguna desconocida que te sorprende. ¿Preparado para arrancar la moto?
Al estar en otro continente, Marruecos nos resulta un país algo lejano, pero realmente lo tenemos ahí mismo, un ferry que cruce el estrecho de Gibraltar y te plantas en un país lleno de matices y con una cultura por conocer. ¿Lo más recomendable? Mínimo una semana si quieres descubrir la amplitud de sus paisajes, pues no todo su territorio está cubierto de grandes desiertos.
Disfruta de la costa atlántica, visita ciudades como Rabat o Marraketch, o adentrarte en el imponente macizo del Atlas. Kilómetros y kilómetros de carreteras que te llevarán a descubrir las profundidades más ocultas de Marruecos para volver a casa con una idea totalmente renovada del país vecino, te lo aseguramos.
Por supuesto España tenía que entrar de una forma u otra en esta lista. No hace falta irse a otro país o cruzar el charco para pisar otro continente y encontrar grandes rutas para moteros, como mucho tendrás que cambiar de comunidad autónoma. Nuestra propuesta es montaña pura y dura con la Transpirenaica, atravesar todos los Pirineos desde Cataluña hasta el País Vasco, o viceversa.
Empezar en pleno Mediterráneo para que al llegar a tu objetivo cambie todo completamente para encontrarte con el frío mar Cantábrico. Cientos de kilómetros que te permitirán conocer los paisajes más recónditos del sistema montañoso, costumbres y tradiciones nuevas, o descubrir una parte gastronómica española hasta ahora desconocida por tu paladar.
De punta a punta de Argentina, no habrá rincón que se te quede por el camino. El idioma puede ser un factor determinante, la facilidad de la comunicación con los argentinos puede hacer que sin pensarlo dos veces te encuentres rumbo al país del tango y el mate para recorrerlo en moto. Eso sí, te avisamos que es una ruta con sus complicaciones y que requiere de cierta experiencia con las dos ruedas, ya que hay tramos en los que el asfalto brilla por su ausencia, aunque los paisajes serán espectaculares.
Tierra de Fuego, la Patagonia o la frontera con Bolivia. El recorrido de más de 5.000 kilómetros es una experiencia única e irrepetible para disfrutar como nunca. Así que si quieres hacerla de una, resérvate unas buenas vacaciones para completarla con calma.
No hay ruta motorista más famosa que esta a lo largo del mundo, uniendo Chicago con Los Ángeles, lo que te lleva a recorrer gran parte de Estados Unidos, atravesando estados como Illinois, Missouri, Texas, Arizona o California. Sin duda es la más mítica, la que cualquier motorista (y no tan amante de las motos) desearía hacer en algún momento de su vida.
Unos 4.000 kilómetros de carretera que te permitirá conocer distintas las ciudades, pueblos, culturas o paisajes que se encuentran en el interior de la inmensa Estados Unidos. Imagínate con una Harley-Davidson, recorriendo las carreteras estadounidenses… ¡serás la envidia de tus hijos o nietos! Eso sí, resérvate unas dos semanas si quieres hacer el viaje como debe ser, con tranquilidad y dando algún que otro desvío para conocer, por ejemplo, el Gran Cañón.
Llegar hasta uno de los extremos más recónditos del mundo es una experiencia soñada para muchos motoristas. Plantarte en el Cabo Norte, en Noruega, es haber pasado por grandes lagos, carreteras infinitas que parecían interminables, o haber contemplado los fiordos desde una perspectiva que nunca pensaste. Es el lugar más septentrional de toda Europa, por lo que muchos consideran que llegar hasta ahí es como llegar hasta el fin del mundo.
Este recorrido puede que sea el más largo de la lista, muchos se pasan un mes entero o más para completarla, ya que salen de cualquier punto de Europa. Pero lo que sí debes saber es que lo mejor es hacerlo con temperaturas agradables, así que los meses de verano pueden ser tus mejores compañeros para llegar al punto más al norte de toda Europa.