Si eres de los que tras la jubilación no quieres dejar a un lado tus grandes pasiones sino aprovechar el tiempo libre para disfrutar de ellas, entenderás entonces a la perfección a los protagonistas de la nueva serie de Movistar Plus 'Sentimos las molestias', protagonizada por Antonio Resines y Miguel Rellán.
"Que la muerte te pille viviendo", proclamaron los dos protagonistas de la ficción durante el acto de presentación del proyecto creado por Juan Cavestany y Álvaro Fernández Armero, y que recuerda mucho a la exitosa serie 'El método Kominsky'. Y es que no hay nada más frustrante que sentirse joven aunque se continúen cumpliendo años. Aparecen las arrugas, las canas y algunos dolores que otros, pero las ganas de seguir viviendo siguen intactas.
Centrada en el mundo de la música, esta nueva comedia de los responsables de 'Vergüenza', explora en seis capítulos de media hora la contrariedad que es llegar a la última etapa de la vida sin dejar de sentirse joven.
Resines interpreta a Rafael Müller, un egocéntrico director de orquesta que mantiene una larga amistad con Rafael Jiménez, el personaje encarnado por Rellán, una vieja gloria del rock, líder del grupo Cuidado con el perro.
Estos dos amigos que han tomado vías muy diferentes en el ámbito musical y en cuyos planes no entra la jubilación, resistiéndose a los achaques de la edad. Y es que, la vejez es un espinoso tema con el que los protagonistas deben lidiar en la ficción... Y en la vida real, ya que la serie aborda desde la comedia dramática lo que supone, para muchas personas, hacerse viejo en la actualidad
El propio Rellán, de 78 años, cree que "hay que aceptar el paso del tiempo con normalidad", asegurando que "lo que no hay que hacer es rendirse". A lo que Resines añade que "la edad o la vejez es una circunstancia". El actor de 67 años presentó este primer trabajo después de pasar 48 días ingresado por complicaciones derivadas de la covid, y tras permanecer en coma inducido en la UCI. Y aunque nota algunas secuelas, se siente con más energía que nunca.
También el papel de Fiorella Faltoyano, que encarna a una esposa cansada de la egolatría y la fatuidad del director de orquesta de música clásica, es importante. Decide dejarle y su historia alejada de los focos por haber cumplido los setenta es una gran crítica a la ignorancia de los directores hacia las actrices de su edad.
De nuevo, se pone el foco en cómo afecta sumar velas a la tarta en el día a día, y en el terreno profesional. Porque al final la edad, es solo un número y lo que vale es lo que está en el interior.