La noticia de que el Kun Agüero pueda tener que retirarse de forma definitiva tras la arritmia cardiaca detectada en el duelo ante el Alavés en el Camp Nou ha conmocionado al fútbol español. Pese a que inicialmente el club anunció que el jugador estaría apartado unos tres meses para seguir un tratamiento que le permitiera volver al ruedo lo antes posible, hoy ‘Catalunya Ràdio’ revelaba que las últimas pruebas a las que se ha sometido el argentino reflejan que ha empeorado la situación, que se considera muy grave, y que pone en peligro su carrera como futbolista profesional. Si eres de los que juegas partidos con amigos los fines de semana, hablamos con Amelia Carro, coordinadora del Grupo de Trabajo de Cardiología del Deporte de la Sociedad Española de Cardiología (SEC), para que nos explique las señales a las que estar atento y evitar un problema cardíaco grave.
Si no eres un deportista habitual o realizas otro tipo de ejercicio, más de fuerza y menos aeróbico, es importantísimo hacerse un chequeo médico que determine cuál es tu situación física. "A partir de los 50, contar con asesoramiento es fundamental. Hay que hacerse una especie de preoperatorio: unas analíticas, un electrocardiograma, chequeo de tensión… durante años se ha pensado que con una prueba de esfuerzo servía, pero realmente hay que desmitificarlo, no te la hacen antes de una operación de corazón y no hace falta antes de empezar con el deporte. No sirve de nada esta prueba y luego llevar años sin unos análisis", explica la coordinadora.
Además, es muy importante tener en cuenta los factores de riesgo cardiovascular, que son los que van a determinar la intensidad y cantidad de ejercicio que se puede realizar. “Hay que mirarse el colesterol… son el conjunto de indicadores que dan una señal de alarma, sobre todo en edades adultas", comenta Carro.
Pese a que el mensaje que recibimos continuamente es que 'sin dolor no hay victoria', la doctora segura que es importante que nos proporcione disfrute y no llevar a nuestro cuerpo al límite. "Una cosa es que si no he corrido nunca y empiezo a hacerlo me cueste y otra cosa es que sufra una falta extrema de aire, esto no está justificado en ningún caso. También hay que parar si sentimos dolor en el pecho, palpitaciones, mareos, disminución de rendimiento, presión en la boca del estómago o una sensación angustiosa”.
Causas de dolor torácico hay muchas (cardiológicas, digestivas, respiratorias, musculo-esqueléticas...) y lo habitual en la mayoría de casos se deba a causas ajenas al corazón, pero por la posibilidad de que se trate de algo grave, no debe ignorarse nunca y hay que actuar con la urgencia que le corresponde. "Debemos erradicar los mensajes que se oyen a diario comparando el sufrimiento con la victoria. Cualquier síntoma que tengamos ya sea corriendo, jugando al fútbol o paseando al perro debe hacer que nos paremos, nos sentemos y pidamos ayuda, no podemos dejarlo pasar", asevera la cardióloga.
La causa clásica del dolor en cardiología es la angina de pecho. Es un dolor sordo y profundo, que suele describirse como opresivo y que típicamente aparece cuando hacemos esfuerzos y desaparece en pocos minutos cuando cesamos la actividad. Cuando este síntoma es nuevo, la lesión que lo produce puede tener un comportamiento impredecible y es una urgencia médica, por lo que hay que ponerse en contacto con el 112 de forma inmediata. No obstante, la disnea o dificultad respiratoria y la fatiga también pueden traducir una angina de pecho atípica o alguna cardiopatía y es importante consultar cuando se perciben
Por otro lado, las palpitaciones o la sensación de que el corazón no late con normalidad puede estar advirtiéndonos de una arritmia o una cardiopatía importante, como le ha ocurrido al jugador del Barça, por lo que no hay que dejar de consultar siempre que se produzcan y no conozcamos su naturaleza.