¿Qué me puede pasar si nado en un lago o un río con bacteria E. coli?

La mala calidad del agua del Sena ha obligado ha obligado a anular los primeros entrenamientos. La incertidumbre ahora es cuándo serán los entrenos de las competiciones acuáticas, previstas para el 30 y el 31 de julio. Ante el mal estado del agua, el Comité de Organización de los Juegos Olímpicos (COJO) junto a la Federación Internacional de Triatlón y las autoridades locales decidieron suspenderlos después de las lluvias del viernes y el sábado porque los "niveles de agua no presentaban las garantías suficientes".

¿Cómo se produce la contaminación?

El sistema de alcantarillado parece estar detrás de la contaminación. Las fuertes precipitaciones han hecho que las alcantarillas no sean capaces de canalizar todo el agua. El desbordamiento ha hecho que parte de las aguas fecales acaben en el río. Esta es una de las formas más habituales de contaminación acuática.

Normalmente, los controles acuáticos miden la tasa de bacterias E.Coli y de enterococos. La tasa de indicadores fecales se utiliza para saber si el agua el apta para el consumo humano en cualquiera de sus modalidades.

¿De qué bacteria se trata?

Según la OMS, la Escherichia coli o E. coli es un miembro del grupo de bacterias coliformes y parte de la familia Enterobacteriaceae. Se trata de una bacteria anaeróbica que crece de manera óptima a una temperatura de 37 °C, precisamente la del cuerpo humano. Además, sobrevive muy bien en el medio ácido de nuestro sistema digestivo.

La gran mayoría de los tipos de E. coli son inofensivos. Sin embargo, algunas cepas de esta bacteria pueden causar problemas gastrointestinales, cólicos abdominales intensos, diarrea con sangre y vómitos, así como complicaciones de salud más graves, como son, por ejemplo, colitis hemorrágica, síndrome hemolítico urémico, insuficiencia renal) e infecciones del tracto urinario.

Síntomas de la infección

Según explica la Clínica Mayo, las señales y síntomas de la Escherichia coli suelen empezar tres o cuatro días después de la exposición a la bacteria. Pero también es posible empezar a desarrollar síntomas solo un día después o incluso más de una semana después.

Entre los síntomas más habituales:

  • Diarrea, que puede ser variar entre leve y líquida y grave con sangre. En este último caso, es necesario recibir de inmediato ayuda médica.
  • Calambres estomacales, dolor o sensibilidad en el estómago.
  • Náuseas y vómitos en algunas personas.

Como explicamos, podemos contaminarnos con esta bacteria a través de las aguas, pero también a través de la comida, especialmente con frutas y verduras crudas o carne de vaca poco cocinada. Por ello, es recomendable lavar bien los alimentos y prepararlos a las temperaturas adecuadas.

En cuanto al tiempo de recuperación, depende de la gravedad, pero el tratamiento más habitual es la ingesta de antibióticos. Los adultos sanos pueden superar la infección en una semana, pero presenta más riesgos entre las personas mayores y los niños. La infección de E. coli es la segunda causa de muerte bacteriana en todo el mundo, con un ratio de 950.000 decesos al año. Los supervivientes pueden desarrollar efectos secundarios graves, como fallos renales o complicaciones neurológicas.