Como en una comedia de Jack Black, Manolo García (69) se lanzó desde el escenario hacia su público pero fue a dar de bruces contra el suelo. Fue el fin de semana pasado, en el Palau Sant Jordi de Barcelona y García, afortunadamente, pudo seguir con su concierto. Esto no viene a cuento de nada, pero es demasiado bueno como para no empezar así una nota sobre Manolo García.
Manolo García también acaba de publicar su primer libro de relatos, 'Títere con cabeza' (Verso & Cuento, 2024), que se vende como "un beatus ille moderno, una crítica desde el humor y la reflexión cáustica a nuestra vida actual, tan llena y tan vacía, a nuestras estructuras mentales y sociales, y una llamada a la animalidad, al instinto y a dar valor a las cosas más anodinas y sencillas de la existencia". Pero tampoco es eso lo que queríamos contar. Lo que queremos contar tiene que ver más bien con el origen de ese libro. Tiene que ver con la amaxofobia.
Técnicamente es el miedo a conducir un vehículo. Por eso es que García ha hablado de "un punto de amaxofobia" para referirse a su caso. "Odio las autovías. Odio la velocidad. No me gusta nada. Me pone muy nervioso" decía en la presentación de su libro. De hecho, ha contado que el primer cuento que escribió, el que dio origen a 'Títere con cabeza', lo escribió tras sufrir un episodio traumático en su coche ya que este repentinamente se incendió. "Me aparte y para abstraerme de ese mal momento empecé a escribir uno de estos cuentos. Para cuando llegaron los bomberos ya lo tenía acabado".
Anécdotas aparte, la amaxofobia es un trastorno de ansiedad que puede tener implicaciones serias en la vida de las personas y que requiere terapia y ayuda profesional. Pero García no es el único que la padece.
Penélope Cruz ha confesado en más de una ocasión que tiene un miedo irracional a los coches. Todo tiene que ver, también, con un accidente. "Mi hermana (Mónica) fue atropellada por un coche delante de mí cuando yo tenía ocho o nueve años -le contaba hace algunos años a Elle-. Para mí el tiempo se detuvo, porque ella perdió el conocimiento. Entonces no fui consciente de que eso se iba a convertir en un trauma para mí. Por eso ahora tengo esa relación con la velocidad. Tengo miedo a la velocidad. Con los años, he visto que los coches son para mí una amenaza”.
Un miedo que experimentan otras celebridades como Cristina Aguilera, a quien le aterra conducir en Los Angeles debido a los paparazzi. O J.K. Rowling, quien huye de conducir porque no confía en su propia 'percepción espacial'. O Mariah Carey, que tiene coches, pero solo como 'objetos de arte' porque no tiene ni carné y siempre ha preferido que la lleve un chófer.
En 'Títere con cabeza', por cierto, García busca reflexionar como quien se sale de la autopista de la vida moderna y se para en el arcén a reflexionar un poco.