El cáncer de próstata es el segundo más frecuente entre hombres de más de 65 años. En el año 2019 hubo diagnosticados 32.461 nuevos casos, según la Asociación Española Contra el Cáncer. No obstante, la supervivencia es cada año más alta, según el MD Anderson Cancer Center de Madrid, la filial española de un centro de tratamiento del cáncer americano. Esto se debe a las mejoras en las medidas de prevención y también al avance de la cirugía robótica, una medida que parece venir para quedarse.
El doctor Carlos Núñez, jefe del Servicio de Cirugía Urológica de MD Anderson Madrid, señala que este tipo de cirugía "mejora el pronóstico de los pacientes", en tanto que les permite reducir los márgenes quirúrgicos. Al reducirse los márgenes positivos, los resultados oncológicos son más precisos, especialmente en los casos donde se realiza "preservación neurovascular". Todo ello consigue que se reduzcan en mayor medida los casos posteriores de impotencia,y aunque en menor medida, los de incontinencia.
La visión esfinteriana que otorga la cirugía robótica es mayor que la de la cirugía convencional, lo que permite, en global, una reducción de casos de incontinencia urinaria. Ello consigue una mejora en la calidad de vida del paciente y, en última instancia, una recuperación mucho más rápida. Por tanto, desde el plano psicológico del paciente, también se observan mejoras considerables.
Un total de 150 casos ya han sido tratados con esta innovadora fórmula. De cara al futuro, la cirugía robótica se está postulando para trabajar con un "puerto único". Con ello se busca evitar las pequeñas incisiones que se deben realizar en el abdomen para abordar el tratamiento.
El doctor Núñez cree que, en lo referente al tratamiento de cáncer de próstata, el futuro irá dirigido hacia la reducción del tamaño de los brazos robóticos que se utilizan en esta fórmula. Con ello, dice Núñez, se mejorará el margen de maniobrabilidad y se disminuirá la interferencia entre ambos brazos. Ello conseguirá un aumento significativo de la efectividad en el tratamiento, que todavía continuando testeándose pero ya parece una realidad.
En Uppers ya te contamos los nuevos tratamientos en la lucha contra el cáncer de próstata. Uno de ellos es la técnica de ultrasonidos, una opción no invasiva que permite acabar con el cáncer en una sesión, sin efectos secundarios -como la impotencia o la incontinencia urinaria-.
La intervención consiste en aplicar una sonda de forma poco invasiva a través del recto. Así, se retira el tumor a alta temperatura y sin dañar el órgano. Con ello se consigue proporcionar una ablación exacta y precisa de la próstata, con bajos índices de complicaciones.
Este método fue probado en España por primera vez el año pasado, en el Hospital de La Moraleja, en Madrid, y también en Valencia. En países como Francia o Italia, se trata de un exitoso método ya frecuente con diez años de recorrido.