Jalea real, muchos beneficios y algunos peligros: cuidado con la hipertensión o el Sintrom

  • La jalea real no es un alimento peligroso, pero sí que hay que tener cierto cuidado si se tienen algunas patologías o se toman ciertos fármacos para evitar su consumo

  • A pesar de sus supuestos beneficios, su alto contenido en azúcar o su poder sobre ciertos sistemas del organismo la hacen peligrosa para algunos grupos de población

En los últimos años la jalea real se ha convertido en unos de esos productos naturales más demandados por sus beneficios, siendo una gran fuente nutricional donde se reúnen proteínas, vitaminas o minerales entre otros componentes necesarios para el correcto funcionamiento del organismo. Su nombre no podía ser más adecuado, pues la jalea real es una sustancia que las abejas obreras segregan para alimentar a la abeja reina y a las larvas en sus primeros días de vida. Ahora bien, a pesar de sus beneficios la jalea real también cuenta con sus contraindicaciones, no todo iba a ser bueno.

Primero, algunos de sus beneficios

La jalea real, por lo general, cuenta con grandes beneficios para el organismo siempre que se tome con moderación, ya sabes que por muy bueno que sea algo nunca hay que pasarse o hará el efecto totalmente contrario al que esperamos. Entre esos beneficios quizá el más conocido sea la aportación de energía que realiza sobre nuestro organismo, dándonos mucha más vitalidad. Además, este poder que ejerce sobre el sistema nervioso podría suponer una mejora en los síntomas de algunas patologías, como la depresión o el alzhéimer.

Entre otras cosas también es conocida por su valor en las mujeres, pues la jalea real ayuda a aliviar los dolores menstruales o los síntomas de la menopausia, aunque también tiene gran relevancia su poder sobre la piel, manteniéndola más saludable y elástica y retrasando su envejecimiento. ¿El principal problema que existe? Que a pesar de asociarle estos beneficios a la jalea real sobre nuestro organismo no existe una base científica sólida que avale con contundencia estas ventajas.

Cuidado con sus posibles efectos adversos

Ahora bien, tras sus supuestos beneficios también existen ciertas contraindicaciones. La primera suele ser evidente: para los alérgicos al polen. No siempre que se es alérgico al polen se va a ser a la jalea real o a la miel, productos procedentes de las abejas, pero sí que se aconseja acudir al médico para buscar su aprobación en su consumo antes de que pueda hacer cualquier tipo de reacción sobre nuestro organismo. Algo parecido ocurre con los diabéticos, pues la jalea real presenta dosis altas de azúcar, por lo que de consumirla lo mejor es hacerlo con aquellas que están edulcoradas con stevia.

Por su parte, hay que tener especial cuidado con las personas que padecen hipertensión o dolores de cabeza fuertes o constantes, como la migraña, ya que la jalea real podría acrecentar estos síntomas, pero si no se presentan y tras consumirla aparecen hay que eliminar su consumo. En otro punto, tampoco es del todo recomendable sobre pacientes asmáticos, puesto que podría ocasionar mayores dificultades para la correcta respiración.

Existe un punto de contraindicación especial, pues la jalea real no es aconsejable cuando se toma medicación anticoagulante, como el sintrom, pues puede repercutir en la circulación sanguínea. Aún así, donde más cuidado se debe tener es en las personas que sufren la enfermedad de Addison, una patología de las glándulas suprarrenales en la que estas producen muy poca cantidad de cortisol, y este déficit afecta directamente a ciertas partes del organismo, como el sistema nervioso o el cardiovascular. De esta manera la jalea real podría empeorar la sintomatología al no permitir el funcionamiento de esas glándulas, que ya de por sí se encuentran dañadas.

No te pases de su cantidad recomendada

Con beneficios y contraindicaciones puestos en la balanza, la jalea real no es un producto peligroso, pero como con la mayoría de alimentos o suplementos hay que guardar ciertas precauciones en algunos grupos de población sobre los que puede ser perjudicial. En todo caso, en adultos no se aconseja consumir más de 500 miligramos al día de jalea real, algo sencillo de controlar, pues se suele tomar a través de cápsulas o ampollas que ya marcan la cantidad que contienen.