Calatayud, juez de menores de Granada: "Quien se salte las restricciones debería ayudar a limpiar baños de hospitales"

  • Partidario de los trabajos en beneficio de la comunidad, Calatayud ha señalado que los infractores aprenderían "algo de provecho"

  • "Las personas que limpian podrían trabajar un poco más descansadas, que falta les hace", explica el magistrado

¿Harto de repetirle a tus hijos eso de 'ponte la mascarilla', 'no te juntes con mucha gente', 'mantén la distancia'? A los jóvenes les está costando más quedarse en casa y ser pulcros con las medidas de seguridad, pero también algunos adultos, que se saltan las normas. El propio Fernando Simón alertaba hace semanas que el grupo con mayor incidencia de contagios en los últimos días era el de los jóvenes entre los 10 y los 19 años, con especial énfasis entre los 15 y los 19 años. Por eso, este juez de Granda lo tiene claro: tenga la edad que tenga el infractor, la solución pasa por los servicios a la comunidad.

Limpiar baños de hospitales

El juez Emilio Calatayud (64 años), que se encarga de los delitos de menores en Granada, ha publicado en su blog personal una medida que impondría a aquellos que se saltan las normas. Partidario de los trabajos en beneficio de la comunidad, su propuesta es que aquellas personas que se salten las normas reciban un castigo ejemplar: limpiar los baños de los hospitales. "No digo que las multas sean una herramienta inútil para castigar a quienes se salten las restricciones e intentar frenar el avance de la pandemia. Pero yo soy más partidario de los trabajos en beneficio de la comunidad, una medida que funciona muy bien en la justicia de Menores", explica Calatayud.

"En este sentido, estaría bien que los que hacen caso omiso de las limitaciones, sean menores o adultos, tuvieran que ayudar a los profesionales a limpiar los baños de los hospitales durante dos o tres meses. Así aprenderían algo de provecho y las personas que limpian podrían trabajar un poco más descansadas, que falta les hace", aduce el magistrado, que comparte su blog con el periodista Carlos Morán.

Calatayud se ha mostrado partidario de los trabajos en beneficio de la comunidad en múltiples ocasiones. El verano pasado, ante un reto viral que consistía en defecar en las piscinas públicas, señaló su voluntad de castigar a los ejecutores a "limpiar váteres durante unos meses". En su opinión, "ningún menor debería llegar a la edad adulta sin haber limpiado un retrete, metiendo la manita en la taza que es como queda bien". Al parecer, cuando se trata de menores, los castigos relacionados con las trabajos a beneficio de la comunidad suelen funcionar y hacer reflexionar a los infractores.

Las sanciones por no respetar las restricciones y medidas de prevención impuestas para contener el avance de la pandemia son multas económicas. Los trabajos en beneficio de la comunidad no han sido incluidos como parte del castigo. Quizá ahora, al plantearse esta posibilidad, se puedan poner en marcha para recordar la importancia de las medidas preventivas en un contexto tan complicado como el de la pandemia.