Aunque la pandemia ha hecho mella, España sigue siendo el país de la Unión Europea con mayor esperanza de vida, según datos del Estado de Salud de la UE. La dieta mediterránea y la instauración generalizada de la atención sanitaria pública colocan a nuestro país en uno de los entornos más saludables para vivir. Pero, ¿es suficiente con estos dos indicadores? ¿Sabemos exactamente qué puede garantizarnos un mayor bienestar y, por tanto, una esperanza de vida más alta? ¿Cuáles son los factores que influyen en esto? Una reputada psicóloga lo explica a la perfección.
Susan Pinker (63 años) es una profesional canadiense de prestigio internacional. Especializada en psicología clínica y autora de libros como La Paradoja Sexual, ha colaborado con cabeceras de referencia como The Guardian, The Times, The Globe o The New York Times. Actualmente escribe columnas para The Wall Street Journal sobre todo aquello que tenga que ver con las ciencias sociales. Y algunas veces, ofrece ponencias y conferencias. Una de ellas, la más famosa, trata sobre los factores que influyen en el aumento de la esperanza de vida.
En una charla TED, Pinker aborda una cuestión compleja que ha preocupado a la humanidad desde tiempos inmemoriales: "¿cómo vivir hasta los 100 años o más allá?". De primeras, suena fantasioso e imposible. Pero podría ser posible. La psicóloga cita los estudios de la investigadora Julianne Holt-Lunstad, de la Brigham Young University, que se fijó en los hábitos de "decenas de miles de personas de mediana edad" y organizó un estudio a largo plazo, que obtuvo sus resultados a los siete años.
A partir de aquellos resultados, Holt-Lunstad estableció una serie de factores haciéndose la siguiente pregunta: '¿qué retrasa la muerte?'. Algunos de ellos son predecibles, pero otros son verdaderamente inimaginables, especialmente los que más favorecen la esperanza de vida. De menor a mayor importancia, según los resultados de la investigadora citados por Pinker, son estos. Ya te avisamos: te vas a llevar una gran sorpresa.
Has leído bien. ¿La familia, los amigos y la calidad de las relaciones sociales predicen con mayor eficacia cuánto vivirás? ¿Más que dejar de fumar, beber o ponerse la vacuna contra la gripe? Pinker, citando a Holt-Lunstad, afirma rotundamente que sí. "Primero, tus relaciones cercanas. La gente a la que recurres para un préstamo si necesitas dinero de repente; las que llamarán al médico si te encuentras mal o te llevarán al hospital; o el que te escuchará cuando tengas una crisis existencial", explica Pinker. "Ese círculo pequeño es un vaticinador muy fuerte, si lo tienes, de cuánto vivirás".
"Esto significa: ¿cuánto interactúas con la gente con la que te encuentras en tu día a día? ¿Con cuánta gente hablas? No solo la gente de tu círculo cerrado, tus amigos más cercanos: ¿hablas con el chico que te hace el café cada día? ¿Con el cartero?", se pregunta Pinker. Afirma, por tanto, que la interacción social y las relaciones -tanto las más estrechas como aquellas que pasan desapercibidas pero constituyen parte de nuestro día a día- son un indicador de cuánto tiempo viviremos. Y que cuanto mejor sean y más formen parte de nosotros, más viviremos.