Llevamos ya seis meses en pleno proceso de vacunación frente al coronavirus que, pese a un inicio obviamente tímido, ahora se encuentra a una velocidad de crucero que solo se ve frenada en el caso de que la llegada de dosis se reduzca. Durante todo este tiempo las polémicas no han sido pocas, principalmente con el suero de AstraZeneca, aunque ahora le llega el turno de la duda a Pfizer, pues la Organización Mundial de la Salud (OMS) se encuentra analizando casos puntuales de problemas de corazón, miocarditis y pericarditis principalmente, después de recibir los dos pinchazos, daños cardiacos detectados inicialmente en pacientes covid.
Ha sido la subdirectora general de la entidad para el Acceso a Medicamentos y Productos Sanitarios, Mariângela Simão, ha explicado que se les ha reportado algunos casos en Estados Unidos e Israel, por lo que se encuentran actualmente "investigando si está relacionado con la vacuna o es parte de la distribución normal". A pesar de lo alarmante que parece el anuncio del estudio por algunos problemas de corazón detectados, Mike Ryan, director Ejecutivo del Programa de Emergencias Sanitarias de la OMS ha explicado que "si bien son notables y necesitan un seguimientos estos han sido casos leves autolimitados".
El Comité para la Evaluación de Riesgos en Farmacovigilancia de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) fue quien inició, a raíz de los casos detectados en Israel, este estudio. En todo caso, han anunciado que la mayoría no han sido casos graves, gran parte de ellos en hombres adultos jóvenes que se recuperaron pasados unos días. ¿Cuándo llegaron los síntomas? Según han indicado, afloraron pocos días después de la administración de la vacuna, casi en su totalidad tras la inoculación de la segunda dosis de Pfizer, suero del que se espera una tercera dosis.
¿Y qué dicen desde España sobre este leve traspiés sobre el proceso de vacunación? En principio, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) se ha limitado ha explicar que por el momento "no se puede establecer una relación causal entre la aparición de miocarditis o pericarditis y la vacunación" frente a la covid-19. Por tanto, parece que la administración de Pfizer seguirá con normalidad hasta que exista una respuesta más concisa por parte de la OMS sobre los supuestos problemas de corazón que puede generar el suero en algunos sectores de la población, ya que también apuntan que "son patologías que se presentan con cierta frecuencia en la población independientemente de la vacunación".
Así, a la espera de resultados, las recomendaciones de las autoridades sanitarias europeas es que se acuda "al médico si en los días siguientes a recibir la vacuna apareciese dificultad para respirar, palpitaciones que pueden acompañarse de ritmo cardiaco irregular y dolor en el pecho".
Tanto la miocarditis como la pericarditis pueden presentarse en toda la población, especialmente al relacionarse con infecciones previas o enfermedades inmunes, con una incidencia baja en España y también en Europa. Los síntomas a los que hay que estar atentos coinciden con los que señalan las autoridades a los vacunados con Pfizer, dificultad respiratoria, palpitaciones acompañadas de ritmo cardiaco irregular, o dolor precordial.