Hay pocas cosas que les gusten más a los niños que pintarse la cara. Cualquier ocasión es válida pero, además, si hablamos de carnaval, maquillaje asegurado. León, princesa, payaso… opciones infinitas pero casi siempre realizadas con las mismas ceras que venden en las tiendas de disfraces. Sin embargo, puede que no sean tan inofensivas como pensabas. La OCU lanza una serie de recomendaciones para no llevarse un disgusto por alergias o rojeces en plena fiesta.
Efectivamente. Parece evidente. Una cera de un euro no es igual que una de diez pero no es tanto cuestión de precios como de los ingredientes que contienen. Hipoalergénico y dermatológicamente testado son dos etiquetas que debes siempre buscar en cualquier pintura de este tipo pero no siempre son fiables. Se trata de simples declaraciones del fabricante y no pueden garantizar la ausencia total de problemas en la piel. Lo que sí resulta fundamental es comprobar que tengan el logo CE.
Tendiendo esto claro, siempre que queramos maquillar a un pequeño, debemos optar por una pintura al agua, fácil de aplicar con brocha o esponja húmeda. Para los labios, la OCU recomienda protectores labiales con algo de color y utilizar preferentemente productos a base de aceites o ceras naturales.
Pese a que sean ceras o pinturas infantiles nunca deben aplicarse en niños menores de tres años y, a ser posible, siempre con una crema hidratante de base para que no estén en contacto directamente con la piel. De esta forma se facilita, además la eliminación del pigmento simplemente con agua y jabón.
Hay que tener en cuenta que son pinturas para ocasiones excepcionales y que si apareciese cualquier tipo de rojez, por mínima que sea, se debe lavar inmediatamente, sobre todo si es en la zona de los ojos.
Y ¡atención!, el maquillaje caduca. Si vas a usar las pinturas del año anterior comprueba que no han caducado. Y, que, pese a estar en fecha, si huelen raro o si los ingredientes acuosos y los aceites no parecen homogéneos, es mejor que no los utilices.
Como con cualquier cosmético hay una serie de ingredientes que debes evitar siempre.
Si hablamos de productos labiales, como ya hemos dicho, es mejor que tengan una base de aceites o ceras naturales y huyendo de aquellos que contienen: